El Sindicato Único del Personal Aduanero de la República Argentina (SUPARA), de tradicional bajo perfil, rompió el molde ante la disposición de la AFIP que relaja los controles aduaneros y le baja el sueldo a sus afiliados. Desde la próxima semana trabajarán a reglamento, y probablemente se haga un paro.

Con una redacción inusualmente encendida, el gremio de los aduaneros se quejó por ser \"el patio trasero de la AFIP\". En una extensa enumeración de quejas -desde paritarias retrasadas hasta la imposibilidad de participar del blanqueo-, el sindicato conducido por Carlos Sueiro anunció que la próxima semana habrá trabajo a reglamento y quite de colaboración. El disparador de la actitud combativa fue la disposición 331/2017, que bajó de categoría -con el consecuente recorte salarial- a unos 150 inspectores de escáners, un cargo clave para combatir el narcotráfico y el contrabando.

En una ruptura de lanzas que nunca se vio, ni con Abad en su gestión anterior ni con Echegaray, desde el gremio apuntan directamente al administrador federal. \"Es muy difícil comprender lo que hace Abad, parece que busca hacer daño por mero placer. Siempre fue una persona razonable, pero ahora se maneja caprichosamente\", apuntó un directivo consultado por Minuto de Cierre. En una serie de medidas que generaron malestar, Abad desarmó el área de la Seguridad Social que controla el trabajo en negro, bajó la remuneración de bolsillo de todos los empleados de la AFIP (incluyendo a los de Aduana), y puso cámaras de seguridad para controlar a todos los empleados de la sede central.