Hace algunas horas, se confirmó que la empresa Textil Río Grande se encuentra a la venta lo que alimentó aún más el grado de incertidumbre que atraviesan los trabajadores de la compañía.

En diálogo con Radio Fueguina, José Belarde, trabajador de Textil Río Grande, expresó que “la situación es muy crítica. Aproximadamente seis compañeros que decidimos judicializar a la empresa y estamos pidiendo la colaboración del Gobierno de la Provincia que nos siga acompañando con los módulos alimentarios. En la parte de Salud nos cerraron las puertas en todos lados y no tenemos un peso para poder pagar una orden hospitalaria.”

En lo personal sufrí mucho durante todo este tiempo porque ando prácticamente enfermo y para sacar una orden uno no cuenta con ese dinero para pagar la obra social. Así como estoy, no puedo entrar a ningún lado porque si me hacen un preocupacional, me va a saltar todo lo que yo tengo. Quedé con problemas de cintura, columna, tengo tendinitis, dos hernias inguinales y quedé lesionado por tantos años de trabajo en la fábrica”.

Consultado sobre el rol del gremio, indicó que “solamente aparece cuando la Municipalidad nos tiene que dar los módulos y los reparten en el gremio. Siento que fuimos abandonados por ellos, por los delegados y por los compañeros. Nos desarmaron la carpa que habíamos montado y hoy peleamos desde nuestro lugar.”

“Esta fábrica se enriqueció durante 40 años en la isla y de un día para el otro quiere cerrar, despedir a los trabajadores y dejando todo a la deriva. Hace cuatro meses no cobrábamos nada y el Gobierno Nacional no quería pagar el Fondo de Desempleo porque todavía no tenemos la baja de la fábrica. La última plata que vi como trabajador fue la segunda quincena de julio”, reveló. “Me deben la indemnización y los sueldos de agosto, septiembre y octubre”.