El abogado querellante, Dr. José Alejandro Colli, habló tras la sentencia que condenó a Carlos Toledo a 19 años de prisión por el homicidio de Franco Agustín García, ocurrido el 12 de octubre de 2023. En una detallada declaración, el letrado reafirmó que durante todo el proceso judicial no existieron dudas sobre la responsabilidad del acusado. "En ningún momento hubo duda de la autoría, hubo duda de cómo fue el procedimiento", expresó Colli, haciendo referencia al seguimiento del caso desde su incorporación en la etapa de instrucción.

Colli explicó que la familia de Franco había decidido, desde el comienzo del juicio, no dar declaraciones a la prensa hasta que se conociera la sentencia, un gesto que respetó durante todo el proceso. "Era una decisión de la familia esperar a este momento de la sentencia, por lo tanto, no querían ni ellos hablar con la prensa, sino hacer este proceso solos", aclaró el abogado, señalando la dificultad emocional que atravesaron los padres de la víctima a lo largo del juicio.

Uno de los puntos más delicados que se trató durante el proceso fue la posibilidad de que una segunda persona estuviera involucrada en el crimen. Sin embargo, Colli dejó claro que, de acuerdo a la evidencia recabada en la instrucción, no existía ningún elemento que indicara coautoría o instigación por parte de otra persona. "La familia lo logró entender, se logró entender perfectamente. También se logró entender que la defensa iba a plantear esas cuestiones para tratar de menguar un poco la pena. Pero si la defensa realmente creía esa versión, debería haberla traído en la instrucción, donde era el momento para que haya una coautoría o una instigación", explicó el abogado, desestimando los intentos de la defensa por plantear dudas en ese sentido.

Consultado sobre si una confesión o reconocimiento del acusado al inicio del juicio podría haber cambiado el curso de la sentencia, Colli indicó que tal vez podría haber influido en la consideración de la pena. "Tal vez hubiera podido cambiar un poco, no la cuestión de la autoría, ni la gravedad del procedimiento, pero por ahí hubiera sido tal vez un atenuante a la hora de considerar el tribunal para imponer la pena, y tal vez hubiera sido algo menos", señaló. Sin embargo, destacó que Toledo mantuvo una postura reacia durante todo el juicio, lo cual influyó en la decisión final del tribunal: "Se mostró realmente reacio en todo momento, no pidiendo ni siquiera disculpas a la familia en la oportunidad de dar sus últimas palabras. Creo que eso también llevó a que se fuera por la máxima solicitada por la Fiscalía".

El fallo, que puso fin a un doloroso proceso judicial, dejó a la familia de Franco García con un sentimiento de cierre, aunque el dolor por la pérdida de su hijo sigue siendo profundo. El abogado Colli agradeció el respeto mostrado por los medios de comunicación y reiteró que, desde el inicio, el objetivo principal de la familia era que se hiciera justicia y se reconociera la verdad de lo sucedido.

La condena de Toledo a 19 años de prisión por homicidio deja en claro la gravedad del caso, y la sentencia refleja la contundencia de las pruebas presentadas durante el proceso judicial.