A partir de una serie de reformas impulsadas por el gobierno nacional, los requisitos para conservar o renovar la licencia de conducir cambiarán significativamente en Argentina desde 2025. Las modificaciones están incluidas en la nueva normativa de la Ley Nacional de Tránsito y afectarán a miles de conductores, especialmente a quienes tengan antecedentes de infracciones o estén dentro de ciertos grupos etarios.

Una de las principales novedades es la implementación de una licencia de conducir completamente digital, que estará disponible a través de la app oficial “Mi Argentina”. Aunque esta versión no tendrá vencimiento visible, su validez dependerá de la aprobación periódica de exámenes psicofísicos. Ya no será obligatorio portar la credencial física, pero sí mantenerla actualizada digitalmente.

La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) confirmó que todos los conductores deberán someterse a un examen psicofísico validado por un profesional de la salud registrado. No superar esta evaluación implicará la pérdida del derecho a conducir.

Los conductores principiantes tendrán que prestar especial atención: si cometen una infracción grave durante sus primeros dos años al volante, su carnet será suspendido y deberán volver a rendir tanto el examen teórico como el práctico para recuperarlo.

Las personas mayores también se verán alcanzadas por los cambios. La frecuencia de renovación de la licencia ahora dependerá de la edad del conductor:

• De 21 a 65 años: renovación cada 5 años.
• De 65 a 70 años: renovación cada 3 años.
• Desde los 70 años: renovación anual, sujeta a examen psicofísico obligatorio.

Para evitar sanciones o la pérdida del carnet, las autoridades recomiendan revisar periódicamente el historial de multas, cumplir con los requisitos médicos establecidos y mantener la información actualizada en la aplicación “Mi Argentina”.

Desde el gobierno señalan que estas medidas tienen un objetivo claro: reforzar la responsabilidad al conducir y evitar que personas no aptas continúen circulando, con la intención de reducir los accidentes viales y mejorar la seguridad en las rutas y ciudades.