Por segundo año consecutivo, una juguetería de Río Grande llevó alegría al corazón de la Base Antártica Esperanza en el Día de las Infancias, donde 17 niños y niñas viven temporalmente junto a sus padres como parte de la dotación argentina.
Lo curioso es que los regalos se enviaron en noviembre del año anterior, dentro de un barril junto a materiales escolares para la Escuela Provincial N° 38 Presidente Raúl Alfonsín. Estos fueron guardados hasta agosto para sorprender a los niños, quienes no han tenido contacto con más personas que los residentes de la base desde el inicio del año.
El especial envío fue preparado por Facundo y Santiago Corrales, dueños de Guadis, una juguetería que desde 2007 se dedica a hacer felices a los niños de Río Grande. “Llevamos dos años enviando los regalos del Día del Niño a la Antártida”, contaron los hermanos a El Sureño. Todo comenzó en 2022 cuando una docente antártica sugirió la idea de comprar juguetes para los niños de 2023, explicando cuántos chicos había y cuánto tiempo estarían en la Antártida.
“Nos pareció una gran idea, como un aliciente para los chicos. Reservamos los juguetes hasta la fecha para que los reciban con alegría y les levante el ánimo”, dijeron. Los regalos fueron donados sin que la docente lo pidiera, y se eligieron cuidadosamente según las edades y nombres de los niños.
La sorpresa fue mutua cuando, después de casi diez meses, la familia Corrales recibió fotos de los niños abriendo sus regalos. “Fue muy emocionante. Uno a veces olvida que la Antártida es parte de nuestra provincia, y que allí hay fueguinos y argentinos. Tan cerca, pero tan lejos…”, reflexionaron.
Guadis, que abrió sus puertas en abril de 2007 y cuenta con dos sucursales en Río Grande, ha visto cambios en el rubro, con una mayor competencia de la tecnología y un cambio en las preferencias de juguetes por género. Sin embargo, los hermanos confían en que esta tradición de enviar regalos a la Antártida se repetirá en los próximos años, como ha sido hasta ahora.
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