Ante la profunda crisis energética que atraviesa la capital provincial, el Gobierno ha decidido tomar medidas de emergencia para asegurar el suministro eléctrico. En un esfuerzo por estabilizar la situación, se ha contratado el alquiler de siete equipos de generación de 1 MW de potencia cada uno, dichos generadores, que funcionan con diésel, serán instalados y operativos en un plazo de 30 días.
Se estima que operarán durante el horario pico de consumo hasta fines de septiembre o mediados de octubre, momento en el cual se espera que el nuevo tablero de control, la cámara de gases y el rotor estén listos, lo que permitirá triplicar la capacidad de generación actual de 13 MW.
La operación, concretada entre Terra Ignis SA y la empresa Sullair, requiere una inversión inicial de aproximadamente 550 mil dólares para el traslado e instalación de los equipos. Además, se incurrirá en un costo mensual de 35 a 40 mil dólares por alquiler y operación, junto con un gasto estimado de 230 millones de pesos por mes en combustible, dependiendo del precio del diésel y las horas de funcionamiento.
Paralelamente a estas acciones de emergencia, el Gobierno busca destrabar con el Gobierno nacional la activación del Fondo para la Ampliación de la Matriz Productiva, con el objetivo de mejorar la infraestructura de generación y distribución de energía. Asimismo, se está gestionando la aprobación de un crédito de 70 millones de dólares del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) para la construcción de una nueva central térmica en Ushuaia, que garantizaría el suministro eléctrico para los próximos 10 a 15 años.
El Gobernador de la provincia, Melella, destacó la importancia de comunicar de manera transparente con la comunidad. En recientes reuniones con representantes de la Asociación y Cooperativa de taxis, subrayó: "Es fundamental compartir la realidad con los vecinos. Queremos hablar directamente con ellos para evitar la difusión de información falsa y especulación política."
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