Tras el enfrentamiento entre facciones en el acto de la CGT del martes, ex combatientes responsabilizaron al Sindicato por los disturbios y roturas en la réplica del Cementerio de Darwin. \'Arrancaron las cruces y las usaron como hachas entre ellos\', acusaron.

Ex combatientes de Malvinas repudiaron los violentos incidentes que se produjeron en Buenos Aires durante el acto de la CGT y exigieron al Sindicato de Camioneros que se haga cargo de los costos de reparación de la réplica del Cementerio de Darwin montado en la Plaza de Mayo, cuyas cruces fueron arrancadas y utilizadas como armas en la trifulca.

En diálogo con Radio Mitre, Tulio Fraboschi, presidente de la Asociación Civil “Campamento TOAS Plaza de Mayo”, calificó al hecho como \"lamentable\" y dijo que se trató de una \"profanación a las tumbas de los héroes argentinos\".

“Arrasaron con todo lo que había. Más allá de que ésta sea una réplica del Cementerio de Darwin -ubicado en las Islas Malvinas- de que sea un símbolo y no un cementerio real, me atrevería a decir que fue una profanación\", denunció.

En ese sentido, tras registrarse -previo y durante el acto- un salvaje enfrentamiento con trompadas, piedrazos, palazos y botellazos, que culminó con varios heridos, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dispuso una cuadrilla especial para reacondicionar el lugar, que, luego del episodio, quedó como un virtual escenario de guerra.

“Le pido por las buenas al señor Hugo Moyano que nos dé una mano para recuperar todo lo destruido. No se metieron solo con el acampe, sino con todos los argentinos. Alguien tiene que hacerse responsable”, denunció Fraboschi.

Cabe recordar que, el martes pasado, los medios nacionales dieron cuenta de una puja interna entre una facción de afiliados al gremio en Tierra del Fuego y otra de la provincia de Buenos Aires, por un lugar privilegiado, cercano al escenario.

Desde la seccional fueguina, desmintieron -varias horas después- la información y deslizaron que los responsables de la gresca fueron \"otro compañeros que no entienden la lucha sindical\".

Según trascendió, el operativo de \"limpieza\" demoró 13 horas y le costó a la administración porteña casi 600 mil pesos, por lo que, desde el Ejecutivo comunal, analizaban tomar acciones contra la CGT.