
La remarcación de precios en las dietéticas están generando la furia de todos los clientes. En medio de la cuarentena obligatoria y el sedentarismo que genera la inactividad, cada vez son más quienes se están volcando hacia el consumo de productos saludables, pero luego de pasar por el mostrador se desinflan las ilusiones.
Para muestra sólo hace falta un botón, dice el clásico refrán. El periodista especializado en economía rural, Matías Longoni, estalló en Twitter por el precio de las dietéticas: \"En la dietética de la vuelta de casa sale 88 pesos el kilo de harina de soja. Serían 88 mil pesos por tonelada. Por lo menos seis veces más de lo que vale la materia prima\". ¡Una locura!
Se trata de uno de los rubros en los que más aumentó el consumo en los últimos años por el cambio de alimentación que intenta la clase media y que se profundizó con el sedentarismo que genera la cuarentena obligatoria.
Estamos hablando de los nuevos kioscos. En su época, a menudo solían abrirse nuevos kioscos con tentadoras golosinas, ahora florecen las dietéticas en todos los barrios de las grandes ciudades.
Lectores de Urgente24 hicieron llegar un caso inaudito que está ocurriendo en pleno barrio porteño de Belgrano: \"¡Carísimas las dietéticas Vitalcer! Estuve comparando precios y tienen los mismos productos hasta el doble más caros que en Tommy, una vergüenza cómo se aprovechan del bolsillo de la gente\".
La cliente comparó el precio de unas galletas de arroz: a pocos metros, otra dietética las vendía $20 más baratas. \"Ni hablar de las barritas de cereal o los mix de cereales para comer con yogurt, por ejemplo\", insistió la lectora en un mail enviado a la redacción.
La cadena de locales alimenticios intentó excusarse con la cliente diciendo que estaba equivocada pero Urgente24 se acercó para comparar los precios y efectivamente la joven está en lo correcto.
En general, cuando se habla del precio de los alimentos, se señalan a las cadenas de supermercados, carnicerías o verdulerías pero lo que está ocurriendo en el mostrador de las dietéticas es una remarcación que no tiene relación alguna con la realidad.
Intendentes, jefes comunales o las sociedades de fomento deberían tomar cartas en el asunto, al igual que la Mesa contra el Hambre cuyo objetivo es cambiar la alimentación de la sociedad para un futuro más saludable.
La clase media está haciendo un enorme esfuerzo en todo sentido e intenta, a su vez, tener día a día una mejor calidad de vida, pero este desafío se hace cada vez más difícil con avivadas como las de las dietéticas.
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