La Dra. Karina Echazú fue consultada acerca del malestar generado en la comunidad ante la libertad del empresario fueguino Darío “el Gringo” Weiss, a pesar de haber sido confirmada su condena por el Superior Tribunal de Justicia, noticia publicada en exclusiva por Diario Prensa.

La ex fiscal de la Justicia provincial sostuvo al respecto que el hecho de que la Justicia no haya dispuesto la detención de Weiss implica “un riesgo para las víctimas que pueden cruzarse con él. Ellas se lo cruzan de forma no intencional porque esta persona no se mide al andar circulando por todos lados. No tiene limitaciones en este sentido y en más de una oportunidad ha ocurrido que se cruzaran. Si un niño, que le cuesta tanto revelar una situación de esta naturaleza, ve que después de todo lo que le costó hablar su victimario sigue en la calle, es difícil que entiendan que sí se hizo algo. Va a entender que por más que se animó a hablar, la Justicia no lo escuchó y no tomó cartas en el asunto. Estas son las cuestiones que indignan a la comunidad”.

Echazú agregó también al respecto que “en general la realización del derecho penal a través de la condena también tiene una repercusión de sanación en la víctima. Yo creo que la impunidad es una forma de revictimizar, aunque en este caso no va a ser impune, porque el imputado ya está condenado”.

Sobre la presentación de un recurso de queja ante la Suprema corte de Justicia de la Nación por parte de la abogada defensora de Dario Weiss, Norma López, la entrevistada explicó que “la posibilidad de plantear un recurso extraordinario ante la Corte Suprema, permite que Darío Weiss siga en libertad y esto es así por la jurisprudencia actual del Superior Tribunal desde el año 2015, basada en el caso Donamaría. Esto significa que por más que se agote la vía de los recursos ordinarios, mientras quede la vía extraordinaria abierta y hasta que eventualmente se rechace el recurso federal, el condenado puede continuar en libertad. Igualmente todavía no está presentado el recurso extraordinario pero hay un plazo para que se agote esa posibilidad. Inclusive hasta que esto no ocurra no estaría técnicamente firme la condena. Lo concreto es que Weiss está condenado en todas las instancias provinciales a ocho años de prisión por el abuso sexual de dos niñas. Esto es así y el Superior Tribunal tendrá que decidir si concede o no el recurso extraordinario. He leído la sentencia y creo que se han cerrado todas las puertas como para que pueda presentar cualquier planteo de arbitrariedad y justificar una presentación ante la Corte Suprema de Justicia”.

Finalmente, la abogada que representa los intereses de una de las niñas vejadas, puso especial énfasis al afirmar: “Si el Superior Tribunal rechaza el recurso o aunque apruebe que se vaya en queja a la Corte Suprema, igualmente Weiss deberá quedar preso. Tanto la abogada Carolina Salgado que me acompaña en esta causa como el letrado Vladimir Espeche, que es querellante por otra de las víctimas, vamos a pedir la detención. En este tramo del proceso ya hay una certeza diferente sobre la condena que le espera, por lo cual entendemos que el peligro procesal que se juzga cobra otra dimensión y hay que volver a analizarlo. Nosotros ya habíamos pedido la detención en el momento de la condena y ahora vamos a volver a plantearlo ante el Superior Tribunal, porque el mismo fallo Donamaría menciona que el delito contra menores tiene un tratamiento diferente. El Superior Tribunal en otro tipo de fallos que ha dictado hace pie en esta diferenciación. Es una posibilidad y, habiéndose agotado las vías recursivas provinciales, el peligro procesal crece y creo que puede volverse a analizar esta posibilidad”.