La familia de la mujer brutalmente asesinada en Tolhuin actuará como querellante en la causa y el abogado Matías Pérez Iglesias confirmó que están a la espera de que se les corra vista a fin de formular acusación para ir a juicio. Consideró que la instrucción de la causa fue “rápida y eficiente”, confirmando que la pericia genética determinó la paternidad del bebé en gestación por parte del detenido, Aldo Javier Núñez.

El padre de la mujer asesinada y descuartizada por su expareja en la localidad de Tolhuin, crimen que quedó al descubierto el pasado 1º de julio, finalmente actuará como parte querellante en lo que queda de la causa que prontamente será elevada a la instancia de juicio oral.

A tal fin actúan ya designados los abogados Carlos Founrouge de Ushuaia y Matías Pérez Iglesias de Río Grande, siendo este último quien reveló pormenores de la estrategia acusatoria que utilizarán contra el detenido Aldo Javier Núñez de 33 años.

“Desde la familia nos contactaron para constituirnos como parte querellante, tenemos acceso a la causa, tenemos copia del expediente; en poco tiempo el juez de instrucción correrá vista a las partes para elevar a juicio”, se esperanzó el letrado.

El Dr. Pérez Iglesias consideró que “la instrucción fue llevada adelante en muy poco tiempo y muy eficaz, esto fue en julio y en septiembre se ha reunido toda la prueba que nos permite brindar la acusación” dijo, agregando que la prueba es contundente.

“Existen muchas testimoniales de vecinos que escucharon entre el 20 y 21 de junio una discusión con ruidos, al mismo momento este hombre volvió al domicilio porque tenía restricción de acercamiento, eso hace sospechar a los vecinos que empiezan a consultar por su amiga y ante respuestas evasivas, lleva al pedido de paradero”, señaló y agregó que “eso luego lleva a la orden del allanamiento que encontró parte de restos de la mujer, y luego la valija”.

El abogado sostuvo que a esto se debe sumar “material genético del imputado: en la valija, en los elementos de corte, huellas de sangre en la casa, y todo eso nos permite sostener una acusación firme”.

El bebé era suyo

En cuanto a la prueba genética expresó que llegó el ADN. “Se hizo una ampliación y se comprobó que Nilda estaba embarazada; mediante la prueba genética se confirmó que era de Aldo Javier Núñez” dijo, calculando el período de gestación “entre 4 y cinco meses”.

Ante ello el imputado “dijo que no tuvo relaciones, que es imposible que sea el padre; eso es su versión y la realidad que tiene en contra es algo irrefutable como es una pericia de ADN”, aseveró.

Este detalle revelador consideró el letrado que no difiere de la ya comprometida situación del imputado; “la situación procesal es la misma, él está procesado por el homicidio calificado por el vínculo” dijo, confirmando además que “vamos a pedir el agravante de femicidio ya que están presentes todos los extremos de este agravante”.

Finalmente en cuanto al posible agravante de la muerte del hijo por nacer señaló que “lo estamos considerando. Hay elementos que permiten entender que se conocía del embarazo y él también lo conocía, él lo niega, no hay elementos que nos lleven a que él conocía de la paternidad”.

La descuartizó en la casa

En cuanto a la mecánica del homicidio el doctor Pérez detalló que se pudo determinar que “existió una discusión, hubo un fuerte golpe en el rostro y la muerte por asfixia mecánica, y luego de producido el deceso tomó el cuerpo, llevó a cabo esta faena de seccionarla y colocarla en la valija”.

Aseguró que esa segunda etapa “fue posterior, hubo poco sangrado, hay elementos que indican se hizo en la misma vivienda, que es un ambiente muy chiquitito”, lo que permite vislumbrar la macabra posibilidad de que cometiera tan terrible acto delante de sus propios hijos; “eso no se puede afirmar, pero no había otro ambiente en la vivienda, hay prueba de material genético en el baño solo puedo decir”, concluyó el doctor Matías Pérez.