El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tierra del Fuego resolverá esta semana qué pruebas admite para la realización del segundo juicio por trata de personas en el local nocturno “Sheik”, donde por primera vez en el país fue querellante una de las víctimas, Alika Kinan.

En el primer juicio realizado en 2016, el tribunal condenó al dueño del local, Pedro Montoya, a siete años de cárcel, y a tres años de prisión a Ivana Claudia García (pareja de Montoya) y Lucy Campos Alberca (encargada del prostíbulo).

Sin embargo, la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por los jueces Ángela Ledesma, Alejandro Slokar y Ana María Figueroa, si bien confirmó parcialmente el fallo, ordenó que se haga un nuevo juicio para evaluar si ambas mujeres fueron coautoras del hecho, y no partícipes secundarias como se determinó en la primera audiencia. Si esa modificación prospera, también podría cambiar el monto de la pena que le corresponde a Montoya.

Una acordada de la misma Cámara de Casación establece que para un nuevo juicio, no es necesario reeditar toda la prueba, sino que se debe realizar una audiencia donde las partes pueden alegar qué pruebas le resultan necesarias para demostrar “los extremos que son parte del nuevo enjuiciamiento”, explicó una fuente judicial a EDFM.

Esa audiencia se llevó a cabo el pasado martes 25 de septiembre. Fue oral pero no pública. Y se discutieron aspectos sensibles como por ejemplo si serán citadas a declarar nuevamente las víctimas del caso, rescatadas del local “Sheik” durante un operativo de Gendarmería Nacional realizado en 2012, varias de ellas de origen extranjero.

“El tribunal lo único que va a resolver es a admisibilidad de las pruebas. A qué testigos se llaman y a cuáles no. Qué videofilmaciones o documentos se dan por incorporados. Ese tipo de cuestiones”, detalló la fuente consultada.

Respecto de la fecha para un nuevo juicio, la fuente señaló que es “muy probable” que se determine para el año próximo, incluso a la espera de que se definan otros planteos contra la sentencia anterior que todavía están pendientes de ser resueltos en la Suprema Corte de Justicia.

Para un nuevo juicio, intervendrían jueces diferentes a los que actuaron en la instancia anterior. Se trataría de Nora Monella, de la provincia de Chubut y Alejandro Ruggero y Mario Reinaldi por Santa Cruz.

Resarcimiento

El juicio de 2016 incluyó un resarcimiento económico de $780 mil que la Justicia impuso a favor de Alika Kinan, y que en caso de confirmarse la sentencia deberán pagar en forma solidaria los condenados y el Municipio, al que se enjuició civilmente por haber facilitado a través de ordenanzas y falta de controles las condiciones para la trata en la ciudad.

Los magistrados dispusieron entonces el decomiso del dinero secuestrado durante los operativos judiciales y del inmueble donde funcionaba el prostíbulo.

“Este es un caso. Ahora vamos por más condenas contra los proxenetas de todo el país. Yo puse el cuerpo. Mucha gente también. No me repara a mí. No repara a mi familia. Pero sirve para continuar por el rescate de otras mujeres que están en esta misma situación”, afirmó Kinan luego del primer juicio.

Fuente EDFM