El gobierno de Javier Milei avanza con una propuesta para reformar la Ley de Migraciones (Ley 25.871), con el objetivo de establecer controles más estrictos sobre el ingreso y la permanencia de extranjeros en el país. Inspirado en medidas adoptadas por líderes como Donald Trump, la administración libertaria planea enviar un proyecto al Congreso Nacional que plantea cambios significativos en el régimen migratorio argentino.

Modificaciones en la residencia y el acceso a servicios públicos

El proyecto busca restringir el acceso a residencias para extranjeros, especialmente aquellos que llegan al país con intenciones de estudiar en instituciones públicas gratuitas, así como a inmigrantes ilegales que adquieren la residencia tras tener hijos nacidos en Argentina. Según fuentes oficiales, se considera que la normativa actual es demasiado flexible y no establece los controles necesarios.

Uno de los puntos clave es la implementación de aranceles sanitarios y universitarios para extranjeros no residentes, una medida ya anunciada por el vocero presidencial Manuel Adorni en diciembre pasado.

Datos sobre la población migrante en Argentina

De acuerdo con el Censo 2022, el país alberga a 1.933.463 extranjeros, representando el 4,2% de la población total. La mayoría reside en la provincia de Buenos Aires (51,4%). Además, en 2023 se registraron más de 29 millones de movimientos migratorios en el país, destacándose una mayor cantidad de ingresos que de egresos.

El gobierno también apunta a casos de abuso en el sistema actual, citando situaciones donde extranjeros que inicialmente llegan para estudiar se quedan indefinidamente, sin cumplir con los requisitos migratorios estipulados.

Cambios en los requisitos para estudiantes y residencias familiares

La propuesta incluye la revisión del programa de regularización Patria Grande, implementado durante la gestión de Néstor Kirchner, que permitió a más de medio millón de personas regularizar su situación migratoria. El gobierno busca eliminar facilidades que permiten a inmigrantes obtener residencia tras la presentación de documentos básicos, como el acta de nacimiento de hijos argentinos.

En cuanto a estudiantes extranjeros, se endurecerán los requisitos para acceder a la educación superior gratuita, justificando la medida en el costo que esto representa para el sistema público.

El proceso actual de ciudadanía y residencia

Actualmente, obtener la ciudadanía argentina requiere cumplir con una serie de requisitos, incluyendo una residencia de al menos dos años en el país, antecedentes penales limpios y medios de vida demostrables. Sin embargo, según el director nacional de Migraciones, Sebastián Seoane, el sistema debe fortalecerse para evitar abusos y garantizar que quienes acceden a estos beneficios lo hagan de manera legal y responsable.

El impacto de las nuevas medidas

El endurecimiento de la política migratoria ha generado debates en torno al equilibrio entre controlar el ingreso de extranjeros y respetar los derechos humanos. Mientras algunos sectores apoyan la iniciativa como una forma de priorizar recursos para los ciudadanos argentinos, otros critican el enfoque restrictivo y señalan posibles riesgos de discriminación.

Con este proyecto, el gobierno de Javier Milei busca marcar un antes y un después en la gestión migratoria de Argentina, alineándose con una visión más estricta y regulada del acceso al país.