Quien también habló fue el Dr. Clemente Vidal Oliver, representante legal de la legítima ganadora de los 11 millones de pesos, y comentó que “ayer nos presentamos por esta situación y pedimos reunirnos con el Presidente del IPRA y no hubo manera de que se accediera a pagar el premio que ella había ganado. Estaba el Sr. Pierotti también. A nosotros nos dijeron que se preocuparon por dejar claro el tema del tope de banca, etc.”

Sobre de qué manera iban a proceder de acá en adelante ante la falta de respuestas por parte del IPRA, aseguró que “mi cliente no va a resignar el premio que obtuvo, pero lo que pasa es que en realidad ni siquiera pudimos conseguir una constancia de que mi cliente se había presentado al cobro como para poder evitar el plazo de caducidad. Si usted no presenta el boleto antes de determinada fecha, después no se lo pagan. Por lo menos queríamos tener esa constancia de que nos presentamos y ustedes no nos pagaron. Tampoco pudimos obtener eso, así que bueno, veremos qué acciones son las que seguimos. Mi clienta por supuesto que no fue advertida por la agencia. El IPRA ni siquiera tiene una quiniela propia, entonces es medio raro lo que sucede. Cuando usted toma el boleto dice que sortea por determinada provincia, entonces de repente, con lo que nos estamos encontrando es que ni el agenciero lo dice, ni el IPRA lo dice antes. El juego de azar pareciera que no es para todo el mundo y no es muy parejo que digamos, entre el apostador y el IPRA”.

Según explicó el abogado, en uno de los articulados del decreto provincial que reglamenta las quinielas, “el Presidente del IPRA puede pagar el 100% del premio si quiere. Es un sistema un poquito raro, por denominarlo de alguna forma, porque la gente va a jugar confiada y entonces después el mismo que le tiene que pagar le dice que no recaudó lo suficiente y que le va a pagar menos. Me empiezo a preguntar que esto no es como el Loto o Quni 6 donde te dicen que el pozo es tanto y usted decide si juega o no. Acá vamos a ver de cuánto va a haber y mi pregunta es cuándo y a quién se lo dicen. Y cómo hago para saber si es verdad que el IPRA recaudó lo que dicen; realmente se llevaron la transparencia a marzo o la tendrán previa, no sé”.

El lunes es el plazo de caducidad donde el cliente debe decidir si va a cobrar los 4 millones o iniciar las acciones judiciales. “Estamos evaluando qué hacer”.