Como parte de las nuevas medidas, el Gobierno anunció que cederá ante uno de los principales ruegos del sector privado por las importaciones. El Banco Central liberará el acceso al mercado de cambio para el pago de importaciones de los insumos que salieron del puerto de origen antes de la última medida. Pymes consideran que se trata de un “logro”, pero sostienen que persiste la máxima preocupación por las importaciones de julio, agosto y septiembre, el impacto en la producción y los precios, y reclaman por el “semáforo validador”.
Luego de la reunión de gabinete económico, encabezada por la ministra de Economía, Silvina Batakis, el Palacio de Hacienda difundió la medida relacionada a las importaciones. Consiste en habilitar el pago de insumos que se encontraban en tránsito, es decir, que hubieran salido de puerto de origen antes del 27 de junio pasado, y arribaron al país con la SIMI vigente hasta esa fecha. Permitirá pagar la totalidad de los pedidos hasta u$s 4 millones o el 40% hasta un tope de u$s 20 millones.
Desde el Banco Central indicaron que será solo para insumos utilizados en la elaboración de bienes en el país. “Vamos a sostener el proceso productivo, las medidas son para ajustar la regulación y evitar efectos no deseados”, manifestó una fuente oficial. Desde el Ministerio de Economía explicaron el objetivo: “Se decidieron acciones tendientes a mejorar las condiciones de acceso al mercado de cambios para el pago de importaciones de insumos para sectores estratégicos, y así garantizar la continuidad de distintos procesos productivos”.
Este era uno de los principales reclamos del sector empresario. “Siempre que salen medidas de este tipo tienen un último artículo que dice que se exceptúa a la mercadería embarcada o con carta de crédito abierta o con un principio de ejecución como pago anticipado. Esta vez no se había puesto esa excepción”, manifestó una fuente de la Cámara de Comercio (CAC). “Las empresas iban a enfrentar una cantidad de conflictos importante”, agregó.
Desde una tecnológica de Tierra del Fuego informaron que si no se tomaba esta medida se encaminaban a un “default comercial”, o a un “freno inminente en la producción”. Los diálogos entre las empresas y los sindicatos en Tierra del Fuego migraron de cómo afrontar la aceleración inflacionaria a qué régimen aplicar en caso de suspensiones por parálisis en la producción.
Desde la entidad pyme ENAC (Asociación de empresarios para el desarrollo) difundieron un comunicado con el título: “LOGRO-habilitan pago de insumos que se encontraban en tránsito”. El texto asegura que realizaron “intensas gestiones en representación de las industrias pymes afectadas”. El comunicado, que detalla la resolución del Banco Central, agrega: “La medida que ordena a las importaciones industriales se da en el marco de una coyuntura difícil, frente a la escasez de dólares”.
Desde que salió la resolución del Banco Central, se viven momentos de máxima actividad entre las cámaras empresarias, con contactos diarios, y con el Gobierno. La semana pasada se realizó un cónclave entre más de 25 cámaras pymes en el hotel Scala, en pleno centro porteño. La medida de las importaciones implica la preocupación por los precios, en cuánto a cuál será el “dólar reposición” para los bienes importados, y el impacto en la inflación y el consumo para el segundo semestre. Pero, sobre todo, ante la incertidumbre si habrá insumos para producir. “Nos quejamos de los problemas, pero somos conservadores para pedir cambios”, contó un empresario pyme del sector textil. Analizan desde pedir cambios en la ley de entidades financieras, hasta la emergencia cambiaria, para darle mayor poder de fuego al Banco Central, contaron.
Además, hoy otra de las preocupaciones pasa por las empresas que tienen “cupo” para poder importar, pero no logran hacerlo, debido a lo que llaman un “semáforo validador”. El semáforo en rojo ocurre por dos motivos: por un lado, porque hay empresas que utilizaron el 20% de flexibilidad para importar que les permitía la medida de marzo, pero que dejó de regir con los cambios de junio. Por el otro, porque se utiliza para chequear el cupo los valores sobre base FOB. “Pero si nosotros compramos con costo, seguro y flete (CIF), el valor es superior al FOB, se computa como pago del mes devengado, lo cual explica el por qué de la gran cantidad de rebotes”, contaron desde la CAC.
Pese a la resolución, desde las cámaras pymes manifestaron que la máxima preocupación sigue siendo por “qué pasará con las importaciones a partir del 27 de junio”. Desde el Gobierno ratifican que la medida finalizará en septiembre, cuando merme la demanda récord de energía. Sin embargo, desde la CAC temen que pueda ser postergada. Fuentes de la Unión Industrial Argentina (UIA) esperan que pueda salir pronto el swap con Brasil para el pago de importaciones. Todas las opciones están sobre la mesa, considera el Gobierno. Inclusive, desde un centro de estudios le llevaron al ministro de Desarrollo Productivo, Daniel Scioli, la propuesta de un “swap” con la Reserva Federal de Estados Unidos.
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