“Tenemos aprobado el protocolo, de acuerdo a las estipulaciones nacionales y provinciales, y se va a habilitar la parte central del cerro, se va a poder esquiar desde arriba hasta abajo, tendremos abierta la silla 1, la 2 y la 3, la parte de fonda, y eso se va a mantener en condiciones para mantener el servicio. Ya hemos fabricado bastante nieve y el sector es amplio para la gente que va a haber. Se puede ir ampliando y ajustando de acuerdo al movimiento”, dijo.

La llegada de turismo nacional “no está ni confirmada ni descartada, porque esto es muy dinámico. Hoy lo veo complicado inclusive en septiembre por la apertura de vuelos. El principal cliente que tenemos para esquí es del AMBA, de donde salen todos, y lo veo complicado. Ojalá pueda empezar a moverse en septiembre, pero habrá que verlo y todavía es muy temprano”, sostuvo.

Consultado sobre esta apertura y si se vieron forzados por la decisión del gobierno, aclaró que “nosotros somos concesionarios y tenemos un contrato. El contrato estipula que si tenemos que abrir, abrimos. Es una decisión del gobierno que ya la veníamos conversando con ‘Willy’ Querciali del INFUETUR y sabíamos que íbamos a tener que abrir. La ecuación no cierra con los residentes, porque el cerro que tenemos ahora no es el mismo de cuando partimos. Tenemos mucho más personal y más servicios, y una montaña totalmente diferente”.  

“Esto socialmente ayuda a que la gente se sienta un poco más liberada, luego del encierro. Todos los centros de esquí de Argentina saben que van totalmente a pérdida y que se está cumpliendo una función social para la gente del lugar”, subrayó.

Estimó que “para igualar la ecuación de entrada-salida, necesitamos que unos 380 residentes por día, los siete días de la semana, paguen el ticket, para pagar el gas, el agua, el seguro, el personal. Es imposible alcanzar ese promedio, pero son circunstancias que tocan vivir y hay que vivirlas. Ya hemos pasado por varias situaciones económicas en el país y acá estamos, seguimos adelante”, expresó. 

“Nosotros tenemos personal fijo y personal temporario, que viene todos los años y está fijo como temporario, con un contrato de trabajo de tres meses. A ese personal por ley lo tenemos que llamar a todos. El 30 de junio hicimos la convocatoria a todos los empleados temporarios, que fueron 180. Algunos contestaron que van a venir y otros que no. Al que no viene no lo despedimos, conservan el puesto de trabajo y el año de antigüedad”, concluyó.

Fuente Sur 54