El intendente Martín Pérez reconoció el malestar de los vecinos que sufren la falta de agua producto de la ola polar registrada días atrás y el congelamiento de cañerías. Admitió que hay serios problemas estructurales en varios sectores de la ciudad, pero destacó principalmente la falta de agua potable que todavía sufren vecinos de la Margen Sur.

“La verdad que a nadie le gusta lo que está pasando porque eso es algo básico y lógico. También es cierto el frio extremo por el cual hemos transitado, que ha significado que muchísimas familias se queden sin agua porque se les ha congelado los caños en sus conexiones domiciliarias y en otros casos con conexiones que tienen que ver con leña municipal, y en la gran mayoría de casos, principalmente en los nuevos barrios, producto de los medidores” destacó Pérez.  

“Ahora, hay una realidad, si los medidores están colocados a 20 centímetros de profundidad, la verdad es que es muy difícil que nosotros en seis meses de gestión podamos resolver esto. Entonces es una política que vamos a llevar adelante, la de tratar de corregir esto, quitar los medidores que no funcionan, de poner nuevos, de recubrirlos como corresponde en el caso que lo amerite y luego hacer las otras obras que son fundamentales” precisó el intendente.

“Por ejemplo, en la Margen Sur, si no tenemos una plata de rebombeo que inyecte más presión para llenar la cisterna de la zona, con el consumo que ha habido en estos últimos días, es imposible llegar a tiempo para poder llenar esas cisternas. Entonces, pondríamos en peligro las bombas y eso sería realmente grave por eso hemos tenido lamentablemente que coordinar esta situación e ir regulándola con nuestros equipos técnicos” detalló.

En ese sentido adelantó que el Municipio anunciará próximamente un proyecto para construir una planta de rebombeo, “una de las obras que tenemos en el plan a firmar con ENOHSA, es una planta de rebombeo que queremos llevar adelante después de la veda invernal para poder inyectar mayor presión a la cisterna de Margen Sur. Les pido paciencia a los vecinos, entiendo que la situación es compleja, no queremos que estén sin agua por supuesto, pero nos hemos encontrado con muchísimos problemas que son estructurales”.