En plena temporada turística, el referente de los almaceneros de Río Grande y miembro de la Cámara de Comercio local, Luis Schreiber, expuso la difícil situación que enfrentan numerosos comercios al momento de recibir acreditaciones por compras realizadas con tarjeta. Según detalló, los problemas más frecuentes se vinculan a demoras en los depósitos de los montos vendidos, algo que empeora durante los fines de semana largos.

El comerciante explicó que, antes de percibir las ganancias, la entidad financiera retiene diversos conceptos, como Ingresos Brutos e impuestos al cheque, lo que, en la práctica, se traduce en un 10% menos sobre el importe final. Aunque parte de ese dinero se recupera tras el pago de Ingresos Brutos, el punto crítico radica en que “primero se paga y recién después llegan los ingresos de las ventas con tarjeta”, generando un descalce financiero en muchos establecimientos.

Otro factor que agrava el panorama es la demora en la acreditación cuando las operaciones se realizan a mitad de semana. “Si el cliente compra un miércoles, el depósito muchas veces llega el viernes; y si se encadena un fin de semana largo, la espera puede prolongarse hasta la semana siguiente. Para un pequeño comercio que funciona con la recaudación diaria, es una situación muy compleja”, sostuvo Schreiber.

Ante esta coyuntura, se prevén reuniones con otros damnificados para identificar las entidades bancarias que aplican mayores retenciones o que demoran más los depósitos. Además, Schreiber planteó la necesidad de un reclamo conjunto que permita visibilizar el problema y exigir cambios en las prácticas de cobro.

Por otro lado, el referente se refirió al reciente ingreso de carne con hueso a la región patagónica. A su entender, esta medida contribuye a moderar los precios en el mostrador, al menos de manera temporaria. “El valor de la carne bajó un poco porque el consumo venía en caída, así que celebro esta apertura para la Patagonia”, concluyó.