Hoy se cumple un año desde la última vez que la familia de la joven Denise Torres García supo de ella. Fue el pasado 1 de julio de 2022, cerca del mediodía, cuando la enfermera de 30 años emprendía la vuelta de un viaje desde nuestro aeropuerto hasta Buenos Aires, en un avión sanitario, donde acompañaba a un bebé de cinco meses en grave estado. Pero, lamentablemente, tanto Denise como el médico que lo acompañaba y los dos pilotos, nunca llegaron a destino ya que segundos después del despegue, el Lear Jet chocó hizo un giro inesperado, se estrelló a los pocos metros, y todos sus tripulantes perdieron la vida.

Pasaron los días y si bien hubo ciertos avances en la investigación que busca determinar las causales del accidente, las novedades son escasas, y la familia de Denise continúa exigiendo justicia.

Mónica Ferrara, madre de Denise, dialogó con Radio Fueguina donde expresó su dolor: “estamos transitando el duelo como se puede porque nunca son las mejores condiciones para transitar un duelo, pero de este modo, te puedo asegurar que es mucho peor. No hay muchos avances, si de parte de la justicia, que hace lo que pueden porque ellos están tomando declaraciones y se avanza en algunas investigaciones de lo que sucedió ese día, pero la justicia depende de los organismos de investigación de Argentina y Estados Unidos porque hay muchas cosas que se enviaron allá y lo único que hemos recibido de esos organismos son las cosas que no sucedieron. Hemos recibido el audio de la cabina donde aparentemente en la conversación entre ambos pilotos, muestra que estaba todo normal. La junta de seguridad de transporte aéreo nos va diciendo las cosas que no fueron las causales de ese accidente, pero todavía no sabemos qué es lo que pasó”.

A pesar de esto, aseguró que “no me voy a quedar quieta hasta saber qué pasó. No voy a aceptar que me digan que nunca se va a saber qué pasó. Esto es un accidente muy extraño, bueno entonces investiguen por qué se cayó ese avión, y por qué mi hija salió a trabajar y no volvió nunca más. Te empieza hacer ruido que haya pasado un año del accidente y todavía no sepamos la verdad. Hay tantos silencios y mucho miedo de sus compañeros que no quieren hablar porque no quieren perder su trabajo en esta empresa que ya tiene siete muertes encima y ya tuvo un accidente anterior en el 2020 donde murieron tres personas, más las cuatro personas, entre ellas Denise, que perdieron la vida el año pasado. Si vos como compañero no hablas, no perdés el trabajo, perdés tu dignidad. Denise no se hubiera quedado callada nunca, hubiera estado luchando si un compañero se hubiese muerto”.

En este sentido, relató que pudo comunicarse con los familiares de las otras víctimas de este trágico accidente, y comentó que “ellos están como yo, esperando qué es lo que pasa. Inclusive hablé con familiares del otro accidente y el comportamiento de la empresa siempre fue desastroso y deshumanizado. Conmigo no se comunicó nadie; ni de la empresa ni de la operadora del avión ni el dueño. Tienen actitudes muy despreciables y esa va a ser la condena social que tendrán departe mía y de toda la gente que quería a Denise. Puede que algún día, yo no esté más en este mundo, pero van a seguir atrás mío luchando por esto. Ya se están escribiendo libros sobre esto, entonces va a depender de todos los que tengan que trabajar en esta causa y cómo van a figurar en estos libros porque los va a condenar la sociedad, te lo puedo asegurar”.

Con respecto a los seguros, comentó que “de esa situación se está ocupando nuestro abogado que es excelente, el Dr. Francisco Ibarra. El seguro es un tema aparte que hoy no quisiera involucrarme mucho porque lo que más me importa es la justicia, pero no voy a permitir que me quieran conformar y cerrar la boca con migajas. La vida de mi hija no tiene precio, y no voy a permitir que sigan destratando la vida de Denise, porque he sentido abandono de todos lados: abandono del Estado, de las empresas y de la compañía de seguros. Me cansé del destrato de todos, y si bien no necesito la plata de mi hija muerta, tampoco se las voy a regalar ni voy a permitir que me sigan basureando. Yo estoy haciendo todo y más de lo que puedo. Quizá lo mío sirva para la condena social y yo confío en la justicia de Río Grande y en mi abogado que va a trabajar para que haya justicia”.

Finalmente, indicó que “estamos empapelando todo el país con volantes de pedido de justicia y eso lo pueden ver en el Instagram que tenemos que es @justiciapordenise. Convoco a todas las personas que quieran involucrarse con esta causa que impriman 10 o 20 volantes y lo peguen en su barrio y donde puedan. También estamos juntando firmas en la petición de change.org. estamos haciendo todo lo que Denise hubiera hecho, porque era una luchadora de las causas justas. Hoy vamos a marchar y van a venir todos sus amigos y familias. Hasta el último día de mi vida voy a seguir pidiendo justicia por ella porque no voy a dejar que esta causa quede en el olvido. Nunca me voy a cansa y voy a seguir”.