El Presidente del Colegio de Martilleros, Tasadores y Corredores de Río Grande, Mauricio Saavedra, dialogó con FM DEL PUEBLO donde se refirió a las modificaciones a la actual Ley de Alquileres que se vienen discutiendo en el Congreso de la Nación y que ya cuenta con media sanción de la Cámara Baja.
Al respecto, indicó que “fuimos invitados como colegio profesional y formando parte del Consejo Federal de Corredores Inmobiliarios. Nos invitó el interbloque de Juntos por el Cambio con la presencia de diversos actores. La única representación que faltó fue la de la Cámara de Inquilinos que fueron invitados a participar. Ahí se debatió y todos coincidimos en que la ley vigente hizo daño y no le sirvió a nadie; ni al propietario ni al inquilino ni a los profesionales que trabajamos en este rubro. La situación es gravísima y la Cámara de Construcción manejan números que son alarmantes. No está construyendo con destino a consumidor final ni siquiera para aquel que quiere realizar una inversión para luego poner esa vivienda en alquiler. Diputados aprobó lo que proponía la minoría y que vuelva a hacer una negociación entre las partes en cuanto al valor y la actualización que se propone en períodos de 4,6,8 o 12 meses”.
En este sentido, consideró que “esto va a dar mayor previsibilidad. Al margen del proceso inflacionario, es el valor inicial que uno le pone a la locación y al no tener previsibilidad, hace que el precio se dispare. La minoría quiere lograr que mínimamente se apruebe estas modificaciones a la ley que en verdad será un paliativo que esto tiene un problema más de fondo porque la falta de inmuebles se debe a que no hay rotación de inquilinos-propietarios y no hay una línea de crédito que sirva. Hoy es imposible. Para hacer una casa estás manejando entre 600 y 800 dólares por metro cuadrado, si se quiere, modelo IPV. Para hacer una vivienda para una familia de entre 4 y 5 personas, de entrada, te sale entre 60 y 80 mil dólares sumado al terreno que son 15 mil dólares más”.
Para Saavedra, “a veces al propietario se lo ve como un enemigo y no es así. Hay que tentarlo al propietario a que ponga esa vivienda en alquiler para que lo tome como renta porque del otro lado la mayoría no dejaban de hablar de impuestos sobre viviendas ociosas. Tenemos que tentar al inversor para que compre en ladrillos y que la renta le pueda generar ese inmueble sea tentadora. Hoy el mercado en Río Grande está colapsado. Si a mí se me desocupa algo, no tengo que ni publicarlo. Hay una lista de espera impresionante y hay llamadas constantes. El tema es muy grave, es complejo y no le veo una salida inmediata, sino solo un paliativo. El problema es de fondo”.
Finalmente, aseguró que “no tengo bandera política, pero la gente de Juntos por el Cambio al invitarnos al participar, que es la única fuerza que realmente está interesada en buscar un cambio, porque la mayoría está discutiendo cualquier otra cosa”.
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