Referentes de comedores comunitarios de Río Grande se concentraron en la intersección de San Martín y Belgrano para expresar su preocupación ante los altos costos de luz y gas, que están llevando a muchos al borde del cierre. El grupo planea entregar un petitorio en la delegación de gobierno y otras entidades para visibilizar su situación.

Una de las voceras comentó: "La situación es bastante compleja. Por suerte, nos estamos uniendo todos los comedores para reclamar por el tema de la luz y el gas. No puede ser que en una provincia de donde sale el gas haya vecinos desocupados que tienen que pagar precios que solo los ricos pueden afrontar."

Sobre el impacto de las tarifas, aseguró: "Hay comedores que están al borde del cierre porque no pueden sostener estas boletas. Son vecinos con trabajos precarizados o que hacen changas, y es imposible afrontar esos montos."

Además, destacó la creciente demanda social: "Cada día aumenta más. Fábricas que cierran, trabajos que se pierden, ¿a dónde creen que va esa gente? A los comedores."

Actualmente, en Río Grande funcionan 74 comedores que sostienen a unas 10.000 personas. Sin embargo, muchas de estas organizaciones están al límite de sus posibilidades. Según un ejemplo citado, las facturas de gas oscilan entre $30.000 y $140.000, cifras inalcanzables para quienes ya enfrentan dificultades económicas.

"Antes había 10 comedores, ahora son muchos más. No debería existir ningún comedor, pero la situación nos obliga. La mercadería que recibimos no alcanza y, cuando podemos, ponemos dinero de nuestro bolsillo para llenar la olla."

Las colaboradoras también destacaron el rol crucial de la solidaridad: "Gracias a la sociedad de Río Grande, que es muy solidaria, logramos estirar los alimentos. Pero la solidaridad no es suficiente. Las compañeras se queman, se lastiman, no tienen obra social ni sueldo. Somos empleadas del Estado gratis."

El petitorio que será entregado a las autoridades solicita medidas concretas para aliviar la carga de las tarifas. La vocera concluyó: "Nosotras ponemos el cuerpo, ayudamos a los vecinos, pero con solidaridad sola no se vive. Esperamos que las autoridades escuchen este reclamo, porque no podemos seguir así."

Sobre el fin de año y las fiestas, expresó: "Cada comedor se está manejando como puede, pidiendo donaciones para ofrecer una comidita de Navidad. Pero la lucha sigue, y hoy vamos a entregar el petitorio, ir a Camuzzi y a varios lados más."