Luego de horas de incertidumbre y polémica, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, confirmó este martes por la tarde la aprobación por parte de su Ministerio de Salud para organizar la Copa América 2021 a partir del próximo domingo 13 de junio, luego de la baja de Colombia y Argentina como sedes.
En ese sentido, Bolsonaro informó que están comprometidas las ciudades de Brasilia, Río de Janeiro, Mato Grosso y Goiás para recibir partidos, mientras que podría sumarse Florianópolis en las próximas horas.
"Estamos en condiciones de realizar la Copa América con los mismos protocolos que se utilizan para los partidos internacionales de clubes", explicó Bolsonaro, en conferencia de prensa.
La clave de la elección de estas ciudades radica en que Conmebol necesita tener absoluta disponibilidad de los estadios, y como el Brasileirao -la Primera División de ese país- recién comenzó, por el momento muchos equipos no podrían entregar sus lugares de localías.
Más temprano, Bolsonaro había asegurado que, en caso de depender de una decisión exclusivamente suya, iba a haber Copa América en aquel país, al tiempo que minimizó los cuestionamientos de la oposición al remarcar que "es el mismo protocolo" que el de la Copa Libertadores.
"Sí es por mí, habrá Copa América en Brasil. Todos mis ministros, incluyendo al de Salud, están de acuerdo en que se juegue el torneo", sostuvo Bolsonaro en declaraciones a la prensa, pese a la fuerte campaña de varios sectores que criticaron la elección de la Conmebol.
"Conversé con la CBF (Confederación Brasileña de Fútbol) y todos los ministros sobre la Copa América. Se está jugando la Libertadores, la Sudamericana, la eliminatoria de la Copa del Mundo, tenemos un partido contra Ecuador el viernes. Nadie dice nada, no tienen problemas con todos esos partidos que ya se están jugando, ¿por qué quieren condenar la realización de la Copa América?", agregó.
En la misma línea, el mandatario brasileño continuó: "Esta es la presión de la prensa llamada Globo, porque la transmisión será de SBT. Por eso están en contra, el protocolo es el mismo de la Libertadores, la Sudamericana y las eliminatorias. ¿Voy a parar la Copa Libertadores, entonces? La Copa América se va a jugar".
En el mismo sentido se expresó el ministro en jefe de la Casa Civil de la presidencia, Luiz Ramos, quien detalló que Brasil "no podía darle la espalda a un torneo tradicional como éste".
El lunes por la mañana, la Conmebol anunció que Brasil iba a ser sede del torneo, luego que el Colombia y Argentina tuvieron que bajarse como sede por la crisis política y de salud, respectivamente, por la la pandemia de coronavirus.
Luego de eso, el propio Ramos puso en duda la realización del certamen continental, lo que volvió a encender las alarmas sobre la viabilidad del certamen.
"No hay nada seguro, quiero decirlo de forma bien clara. Estamos en medio del proceso, pero no eludiremos una demanda, si podemos atenderla", manifestó Ramos.
Todavía resta informar por parte del Gobierno del vecino país si las delegaciones, que tendrán un máximo de 65 integrantes, deberán estar obligatoriamente vacunados, ya que por más que sean inolucados ahora no llegarían a generar los anticuerpos necesarios previo a su llegada a Brasil.
Hasta el momento, según había revelado el vicepresidente de la Asociación uruguaya, Gastón Tealdi, seis Selecciones habían retirado las vacunas Sinovac, aunque una de ellas (Perú) se negó a aplicarlas. Uruguay, Paraguay, Venezuela, Ecuador y Chile sí lo hicieron.
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