Uno de los pioneros de la carrera esperada por los fueguinos, Gabriel Perez, se hizo presente en la trigésima séptima edición de la Vuelta a la Tierra del Fuego luego de haber participado veintiséis vueltas “estuve en la primera edición de 1984 y mi última fue en el año 2010, hasta ahí llegamos porque ya en la última me costaba mucho entrenar, el trabajo, los compromisos y uno ya siente que es grande”.Comentó cómo su reencuentro con viejos amigos lo hicieron recordar muy buenas épocas “hay que disfrutar”.

Su primera participación en el año ‘84 lo recuerdo y nos comenta que “no tenía un peso, nada agarre la moto asi como estaba, una moto que la había comprado hacía 2 o 3 días, una antiparra prestada, un casco prestado, una campera prestada, un camión que iba levantando todo lo que iba quedando atrás y una mochila llena de bujías. Nada de ropa para cambiarse allá, auxilio, nada iba y dormía en un albergue, esa noche nos atendió Don Julio Sarmiento, el papá de Julito Sarmiento nos ayudó muchísimo”.

Agregó “fue un sufrimiento pero para mi fue lo mejor que viví”. Recuerda que el primer año “el Gabi Santana le mando bidones por los costados, por todos lados porque no había dinero para llevar auxilio. Hoy no, van todos con el auxilio al lado, asistencia, cambias ruedas, guantes, cascos, todo”. Comentó que todos los que vivimos acá “la pasamos bien con plata y sin plata”. Recordó que la primera vuelta se largo en la trucha “eran las más largas y muy presionado”, muy emocionado comentaba su sentimiento de llegada a Río Grande “no querías que se te rompa nada”.

Destacó que sus antiguos compañeros de carrera le preguntan si asistirá a la vuelta a lo que responde “voy a ir a pasar el fin de semana en familia, porque toda la vida anduve a mil despues a mil cuando corría mi hijo que este año no va a estar y 10 años anduve en categoría libre, me entrenaba cuatro o cinco meses antes”. No pretende ganar nada “voy a ir y venir, no me quiero embarrar” comentó Gabriel Perez