En el año 2017, las elecciones para renovar autoridades en el al Sindicato de Químicos y Petroquímicos de Tierra del Fuego, debieron realizarse en el interior de un camión porque la sede sindical estaba cerrada.
En el año 2017, las elecciones para renovar autoridades en el al Sindicato de Químicos y Petroquímicos de Tierra del Fuego, debieron realizarse en el interior de un camión porque la sede sindical estaba cerrada.
Los inconvenientes institucionales en el Sindicado de Químicos y Petroquímicos de Tierra del Fuego no son nuevos. Desde los últimos tiempos de la gestión anterior se han sucedido denuncias sobre aspectos que tienen que ver con el normal funcionamiento de una entidad sindical.
El punto máxime de esa etapa se dio cuando debieron realizarse las elecciones para renovar autoridades en el año 2017, momento en que existieron denuncias cruzadas, entre oficialismo y oposición, sobre la validez del proceso electoral, llegando a realizarse las elecciones en el interior de un camión con la presencia de un dirigente de una de las Federaciones del sector actuando como veedor, porque la sede sindical estaba cerrada.
Era el inicio del final de la gestión que en ese momento encabezaba Mario Camino, para dar lugar al inicio de la gestión como Secretario General de Javier Álvarez.
Los procesos administrativos en el ámbito del Ministerio de Trabajo de la Nación siguieron sus cursos desde ambas partes.
A la actual gestión que encabeza Javier Álvarez le ha tocado enfrentar un feroz ataque anti sindical de parte de la empresa Tecnomyl, que tuvo como corolario el despido de varios trabajadores en clara violación de una conciliación obligatoria, el ajuste de la empresa sobre los salarios de los trabajadores, todo ello en medio de dos Federaciones nacionales de disputan también el ámbito de aplicación de cada Convenio Colectivo de Trabajo.
Acalladas las expresiones públicas luego de un conflicto que llevó meses, con movilizaciones y piquetes permanentes en el exterior de la empresa Tecnomyl y frente al Ministerio de Trabajo de la provincia, parece ser que los trabajadores han hecho el balance de lo acontecido y han resuelto cambiar el rumbo institucional, para lo cual han solicitado a la Comisión Directiva el pasado 4 de setiembre se convoque a una asamblea general de afiliados para tratar como único tema la destitución de la Comisión Directiva, petición que a la fecha no ha prosperado. El pedido cuenta con el respaldo de más del 70% de los afiliados.
Paralelamente, se conoció que quien era Secretario de Organización de la entidad sindical, y fuerte activista en el momento de mayor conflicto, Facundo Miño, habría llegado a un acuerdo con la empresa Tecnomyl, desvinculándose, y radicándose en otra provincia.
A la gestión de Javier Álvarez le quedan dos años de mandato, pero de acuerdo a la cantidad de trabajadores que firmaron el pedido de asamblea extraordinaria para destituir a la Comisión Directiva, todo indica que los tiempos como Secretario General no serán los estipulados en el estatuto del gremio.
Fuente: gremiales del sur
Compartinos tu opinión