Tal como se pudo apreciar en las imágenes publicadas por Gaceta Marinera, el Comando de Aviación Naval ha logrado recuperar uno de sus ASH-3D Sea King. Las actividades preparatorias del rompehielos ARA «Almirante Irízar» Q-5, de cara a la próxima campaña antártica de verano, sirvieron de ocasión para que se pudiera apreciar al 2-H-239 nuevamente en servicio, luego de un prolongado período de ausencia.

Indudablemente, la puesta a punto de un nuevo Sea King resulta una grata noticia ya que viene a reforzar a los dos UH-3H Sea King que actualmente sonde dotación en la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros (EAH2). Los mencionados helicópteros resultan una herramienta esencial durante la Campaña Antártica de Verano ya que permiten el reabastecimiento por vía aérea de las distintas bases permanentes y temporarias argentinas en el continente blanco. A los fines de tener una idea del trabajo efectuado por los Sea King, sus tripulaciones y personal técnico, podemos mencionar que en la última CAV los helicópteros aeronavales volaron 250 horas, tiempo durante el cual movilizaron 1.721.115 kilogramos de víveres, materiales científicos y de construcción así como combustibles. También trasladaron 948 pasajeros

Vale destacar que los Sea King del EAH2 son los únicos helicópteros actualmente disponibles para embarcar en el ARA «Almirante Irízar» con las capacidades necesarias para realizar con éxito las tareas de reabastecimiento.

La flota de Sea King podría verse incrementada y modernizada en sus capacidades si la Armada Argentina logra materializar el proceso de adquisición por dos unidades SH-3H, aeronaves que deberán ser debidamente recorridas y actualizadas (principalmente en lo que a aviónica y cabina se refiere). El proceso de adquisición se inició en el mes de abril con la publicación de los pliegos de bases y condiciones, habiendo abordado desde este medio los distintos detalles respecto a la mencionada compra.

La Armada Argentina supo incorporar en 1987 cuatro unidades de ASH-3D Sea King, dos en versión utilitaria (0794/2-H-236 y 0795/2-H-237) y dos antisubmarina (0796/2-H-238 y 0797/2-H-239). Los utilitarios se perderían junto al ARA «Bahía Paraíso» B-1, buque polar de la Armada que se hundió en las frías aguas antárticas a comienzos de 1989.