En medio del anuncio de los ajustes en las tarifas de luz y gas que afectarán los presupuestos de la población, el Gobierno ha generado sorpresa al difundir una serie de recomendaciones a través del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) para reducir el consumo de gas en un rango del 30% al 60%.

Estas curiosas sugerencias, que parecen irónicas por su obviedad, buscan "optimizar" el uso del gas, según el documento compartido también por la Secretaría de Energía a cargo de Eduardo Rodríguez Chirillo. Entre las inusuales recomendaciones se encuentran medidas como "evitar infiltraciones de aire en puertas y ventanas", "colocar burletes", "aprovechar el sol", y "uso de Plástico de burbujas aislante térmico de ventanas".

Otras sugerencias incluyen "calefaccionar un par de horas antes de ir a dormir y apagar o bajar la temperatura a la noche", así como "usar frazada/manta". Sorprendentemente, la lista también abarca consejos tan básicos como "usar pijamas y sábanas abrigadas" en invierno, lo cual ha generado cierta ironía y escepticismo entre la población.

Estas medidas se suman a las recientes estrategias mediáticas que intentan aligerar el impacto de los aumentos y hacer frente a la creciente inaccesibilidad de los servicios básicos para el ciudadano promedio. La difusión de este tipo de recomendaciones ha generado debates sobre la efectividad de tales sugerencias ante el desafío económico que representan los nuevos cuadros tarifarios.