En una reciente entrevista, Roberto López, secretario general de AOT, abordó la situación crítica en BARPLA y el diálogo con la empresa. “Nosotros anticipamos que esto podía llegar a ocurrir. Estuvimos en el Ministerio de Trabajo con el gerente, donde se arreglaron dos suspensiones: la primera se pagó al 100% y la segunda al 75%. Luego, nos enteramos de que el gerente reunió a todos los empleados y les comunicó que ya no habría más suspensiones y que cerrarían las puertas”.

López enfatizó que la situación está relacionada con el último anuncio que excluyó a BATLA. “Todo tiene que ver. Lo de BARPLA es distinto a Australtex y Fabrisur, ya que ellos decidieron judicializar el decreto de entrada, lo que sabemos que lleva tiempo”.

Al preguntarle si BARPLA cumplía con las condiciones para estar dentro de sus regímenes, López afirmó: “Hace rato que estaban adentro. Para nosotros cumplía. BARPLA venía trabajando tranquilamente, pero luego comenzaron a controlar a toda la empresa y encontraron algunas irregularidades, lo que provocó esta situación”.

La crisis afecta a 31 trabajadores de BARPLA, lo que representa una pérdida significativa en recursos humanos. “Esto lo veíamos venir. Lo único que teníamos que hacer era ver qué decidían, pero sí, judicializaron y aparentemente no pueden seguir trabajando”.

López mencionó que se comunicaron una o dos veces con el gerente de la empresa, pero él explicó que los problemas eran de los procesos productivos. “Aparentemente, le sacaron todos los procesos productivos y no pueden seguir trabajando”.

Ante la pregunta de si el gremio podía hacer algo más, López aseguró: “Vamos a tratar de hacer todo lo posible para que los compañeros de BARPLA reciban la indemnización como corresponde. La vez pasada, estuvimos en Ushuaia con el gobernador y le pedimos que sacara la judicialización. Sin embargo, ni el gobernador hizo caso y quiere seguir adelante con eso”.

López subrayó la responsabilidad de los empresarios: “El gremio no tiene la culpa de las decisiones del dueño. La gente que trabaja es su patrimonio. Ellos no piensan en las 31 familias afectadas; solo piensan en ellos mismos”. También resaltó que “las empresas textiles deben cumplir con las condiciones para permanecer bajo AOT”.

En cuanto a la posibilidad de recabar información en Buenos Aires, López aclaró: “Ahora tenemos que esperar que respondan a Australtex y a Fabrisur, que tienen 20 días para presentar. Con BARPLA ya no se puede hablar, pero con Australtex y Fabrisur vamos a tratar de hacer todo lo posible para que sigamos trabajando”.

Finalmente, reflexionó sobre la situación actual de las empresas textiles: “Éramos 11 empresas, ahora quedan 7. Si cierran más, solo quedaremos con 80 trabajadores. Es un asunto grave”. Sobre Australtex, López expresó que rechazaron el anticipo de vacaciones: “Hoy pedí con urgencia una audiencia en el Ministerio para hablar con la empresa y resolver esto”.