El caso judicial iniciado a finales del año 2015 tuvo este viernes una resolución de parte de la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones que rechazó la apelación que presentó el abogado que representaba a un grupo de padres, informa el portal de noticias Resumen Policial.

Los camaristas señalaron que la apelación ni siquiera debería haber sido concedida por no cumplir con los requisitos legales pertinentes, ni con base argumentativa que la sustentara, por lo que confirmaron el fallo de primera instancia del juez de Instrucción Andrés Leonelli.

Con esta medida el docente Marcelino Monchietti queda exento de toda responsabilidad ante acusaciones que comenzaron en un grupo de WhatsApp de padres del jardín 21, quienes tras radicar la denuncia, fueron a la casa del docente donde prácticamente lo lincharon frente a su familia.

Tras esto los padres amenazaron a directivos y docentes del jardín, a quienes el ministerio de Educación removió de sus cargos en forma improcedente, a causa de la presión “popular” de una situación que rápidamente se salió de control incluso con protestas en el centro de la ciudad.

Sin pruebas

Luego en sede judicial incluso algunos padres amenazaron e intentaron agredir al juez de la causa, el Dr. Andrés Leonelli, quien ahora vio confirmada su decisión por parte de otros tres magistrados de la Cámara.

Los menores fueron evaluados por todo un gabinete de profesionales, y en ninguno de los casos se encontraron indicios de abuso. El único caso que mostraba algún indicio en ese sentido, los elementos indicaban que el abuso surgía desde su propio entorno.

Ahora resta evaluar cuál será el temperamento a adoptar por los padres que se presentaron como querellantes, si deciden llevar la cuestión a otra instancia, en una vía judicial casi sin vuelta atrás en cuanto a lo probatorio.

Ahora van contra los padres

A partir de este fallo la defensa de Monchietti, representada por el Dr. Alejandro de la Riva, ahora va por la segunda causa que se armó en relación a las lesiones y la agresión de la que fue víctima el docente, por la cual ya hay un grupo de cinco padres identificados y notificados de derechos y garantías por el hecho.

Precisamente esta semana el docente debiera comparecer a prestar declaración testimonial por ese hecho, en el cual su defensa incluso avanzará con posterioridad en una demanda civil para un docente que prácticamente vio terminada su carrera profesional y su vida en la ciudad a partir de este episodio que generó amplia convulsión social, sin prueba alguna.