Nancy es la madre de Agustín Goldhardt, el joven misionero de 20 años que fue asesinado en Tolhuin por un sujeto que ya tenía antecedentes por violencia y fue denunciado en reiteradas oportunidades por su ex pareja.

Desde la localidad El Alcázar, su madre manifestó que el cuerpo del joven todavía no fue entregado a su familia y continúa en la provincia. “Nos dicen que todavía no llegó el informe de la autopsia del cuerpo de mi hijo a la jueza y con todos los feriados largos, se complicó un poco, y estamos esperando porque ya no aguantamos más el dolor y queremos que nos manden el cuerpo de mi hijo para darle una sepultura cristiana en su pueblo donde nació y se crio. Estamos desesperados”.

Según relató su madre, “Agustín tiene familiares acá en la provincia, tiene a sus primos y a una tía. Tiene a muchos familiares. Él era un excelente hijo. No tenía quejas de él. Era muy querido y la verdad es que tenía muchos amigos. Era un chico muy amable y querido por todos. No sé por qué le hicieron eso. Terminó su secundaria y él fue a Tierra del Fuego para trabajar y ganar su plata; su sueño era comprar un auto y después ayudarnos a nosotros para salir adelante porque nosotros somos pobres y él se fue allá para trabajar para salir adelante y ayudarnos”.

“Pido justicia porque no merecía morir de esa forma como lo mataron. Es muy doloroso pensar eso. Él era muy bueno y quiero que el asesino pague por lo que hizo. Queremos que por favor liberen el cuerpo de mi hijo lo antes posible porque no aguantamos más tanto dolor. Le imploro a la justicia que liberen el cuerpo de mi hijo, no podemos más”.