Se trata del caso de una víctima de la ciudad de Río Grande que fue estafado mediante el sistema de homebanking del Banco Nación. En noviembre pasado, ciberdelicuentes solicitaron un préstamo de casi 5 millones de pesos que fue otorgado y distribuido a unas 30 cuentas CBU. Se falló a favor del cliente, con la orden de suspender los descuentos del crédito, en tanto que se avanza con la investigación para identificar a los autores.

La Jueza Federal a cargo del Juzgado Federal de Rio Grande, Mariel Borruto, falló a favor del cliente damnificado, tratándose de un adulto mayor, característica en común que los estafadores se enfocan para llevar adelante este tipo de delitos.

El abogado querellante que lleva adelante esta causa, Dr. Francisco Giménez, brindó detalles sobre el dictamen, a partir de la presentación judicial realizada ante la falta de reconocimiento del caso en el banco. “Hoy se dan dos cuestiones para este tipo de delito, el avance de la tecnología y la bancarización, todo lo que tiene que ver con el manejo virtual que tiene el cliente con el banco”.

“Por un lado, los bancos que no toman las medidas de seguridad necesarias para evitar las estafas virtuales y, por otro lado, los delincuentes que se aprovechan de esta situación ante personas vulnerables”, indicó respecto a los adultos mayores que no están familiarizados con las tecnologías y la seguridad en internet.

En el caso de su representado, el letrado, enfatizó : “los bancos necesitan invertir en tecnología para evitar esto, porque una persona asalariada que tiene el ingreso de su sueldo en una cuenta, en donde tiene movimientos normales como lo puede tener cualquiera de nosotros y de repente sale de lo normal, en donde vacía todas sus cuentas, la distribuye a 30 CBU distintos, y le sacan un crédito apretando un click, en este caso de casi 5 millones de pesos, y no les ha saltado ningún tipo de alarma en los sistemas informáticos”.

En esa línea, comentó que mediante distintos mecanismos logran acceder a las cuentas de homebanking, para vaciarlas, sacar créditos y transferir inmediatamente a varias cuentas, “dejando a las personas absolutamente desprotegidas, sin ningún monto en sus cuentas y endeudados por un crédito. Los bancos ante el reclamo del cliente de haber sido víctima de este delito, reconocen que hay una estafa, pero no se hacen responsables, cuando son los responsables de mantener las medidas de seguridad para evitar este tipo de fraude. No tienen el recaudo de llamar personalmente a esta persona para preguntarle al cliente si realmente sacó un crédito cuando nunca lo había hecho”.

El descuento del préstamo implicaba alrededor del 70% del salario del usuario, “la jueza federal dio la orden que se suspenda todo y prohibió que le descuenten el crédito a la resuelta de ver cómo sigue la investigación a cargo de la fiscalía federal de Río Grande. Este fallo es un antecedente para que la gente sepa que en caso de haber sido víctima y no tener respuestas por parte de su banco, tiene la posibilidad de recurrir a la justicia para que atienda su reclamo. Si es verosímil el relato o prueba lo sucedido, ordena a los bancos, en este caso a la suspensión del crédito que están cobrando, y en algunos casos, en otras jurisdicciones del país, se la ha dicho a los bancos que deben devolver toda la suma”, detalló Giménez.

Finalmente, afirmó que la investigación está en etapa de identificación de los destinatarios, “ya están identificados y veremos cuáles son los pasos a seguir con la fiscalía porque nos constituimos como parte querellante. Son todos CBU de distintas partes del país, pero hace sospechar que estas personas también pueden ser víctimas, en donde se usaron sus CBU como trampolín para que se pierda el rastro del dinero”.