El fiscal Eduardo Tepedino informó los primeros resultados de las pericias a la bebé de cuatro meses que fue internada en terapia en la clínica CEMEP por fracturas múltiples.

Se trabajaba sobre la hipótesis de una enfermedad congénita, pero las pericias médicas arrojaron los primeros resultados y sostienen que las lesiones “son compatibles con maltrato físico”.

La bebé había sido llevada por su madre, de 19 años, hoy imputada por “lesiones graves agravadas por el vínculo”, al igual que el padre de la menor, que tenía un contacto diario con su hija.

El fiscal Tepedino recordó que se allanaron el jueves pasado las viviendas de los padres y, entre otros elementos, se secuestraron los celulares de ambos, que fueron citados a indagatoria ese mismo día. No se negaron a declarar pero desconocieron la causa de las lesiones de la bebé y no aportaron información sobre antecedentes de enfermedades óseas, ni de la menor ni de familiares, señaló el fiscal.

“El tratamiento médico se hará en Buenos Aires y la bebé será trasladada para que se hagan los estudios correspondientes”, dijo de los estudios genéticos para terminar de descartar una enfermedad ósea congénita.

La bebé “había nacido prematura y se trasladó de urgencia a Buenos Aires a finales de agosto. Regresó a mediados de noviembre a la provincia”, apuntó el Dr. Tepedino.

Actualmente “el estado de salud es estable y evoluciona bien. Podría continuar en sala común e incluso en una vivienda. La justicia de familia está determinando si van a designar una familia de acogida o algún familiar”, dijo, si bien se inclinan más a la familia de acogida, que deberá hacerse cargo del traslado a Buenos Aires.

“Los dos padres tienen prohibición de acercamiento y contacto directo con la bebé”, confirmó el fiscal, como también que se dispuso una custodia policial en el ingreso de la habitación de la bebé, para evitar el acercamiento de los padres.

“La causa está caratulada como lesiones agravadas por el vínculo. Tengo imputados a ambos padres porque no puedo descartar que haya sido uno u otro, o los dos. Por el momento son lesiones que hoy ya sabemos que se trata de lesiones graves, y agravadas por el vínculo”, remarcó.

Agregó que las pericias telefónicas aportaron conversaciones entre los padres “de interés para la causa”. Comenzaron en la tarde del jueves sobre varios celulares y “hay recopilada mensajería de las redes sociales, fotografías y registros fílmicos. Los peritos nos han hecho saber que hay conversaciones entre las partes que pueden resultar de interés para la causa”, indicó.

Aclaró que “ellos nunca convivieron y la chica cuando queda embarazada ya no tenía relaciones con la otra persona, que se entera por terceros cuando estaba avanzado el embarazo”. Sin embargo “el contacto con el padre era cotidiano, pasaba todos los días varias horas a la tarde, incluso los fines de semana”, desde que nació la niña.

El Dr. Manrique, forense de Ushuaia, se presentó el miércoles en la clínica por orden del juez Dieguez y revisó a la niña. Hoy estaría terminada la pericia completa pero hubo un informe provisorio: “Nos hizo saber la constatación fehaciente de las lesiones, que son múltiples, y que esas lesiones son compatibles con agresiones físicas, con algún tipo de maltrato físico”, sentenció el fiscal.

Respecto de la enfermedad ósea, para el forense “no surgen datos pero todavía no se puede descartar hasta realizar los análisis genéticos en Buenos Aires”.

Consultado sobre la ausencia de hematomas externos que den señales de golpes, explicó que “por el paso del tiempo” pudieron desaparecer. “El médico nos dice que algunas lesiones no cicatrizaron, no se soldaron algunos huesos, pero tendrían más de veinte días y es el tiempo que tarda en desaparecer una marca exterior”, concluyó el fiscal.

Sur 54