Fueron las palabras del Dr. Gustavo Ariznabarreta - Defensor General ante el Superior Tribunal de Justicia de la Provincia, por el caso de Gina Cárdenas imputada del delito de homicidio calificado por el vínculo. Tras conocerse la sentencia a prisión perpetua, el letrado hizo un análisis del juicio y el pedido de absolución de Cárdenas.

En declaraciones por FM del Pueblo, el Dr. Ariznabarreta indicó la existencia de tres variables presentes en el juicio, “primero la variable más grave que fue la que salió en el veredicto, con fundamentos que todavía no se tienen y se van a conocer recién el viernes, que es la de haber calificado como homicidio agravado por el vínculo. Esto tiene una pena única que es prisión perpetua”.

Por otro lado, agregó, “una variable intermedia que es la que planteó el fiscal, argumentando que había un homicidio agravado por el vínculo pero que había lo que se llama: ´circunstancias especiales de atenuación´, esto quiere decir que el Código Penal habilita que se pueda manejar una escala penal propia del homicidio simple, que es de 8 a 25 años”.

Ante esto, recordó que el fiscal, Eduardo Urquiza solicitó la pena mínima, “argumentando cuestiones que tenían que ver con la estructura de la personalidad de Gina Cárdenas, a la luz de un informe pericial forense”, por su parte sumó: “y el plano que habíamos manifestado nosotros fue que, obviamente el homicidio no se discutía, porque desde lo fáctico estaba acreditado, pero se explicó en que marco sucedió el homicidio. Esto nos llevaba al marco de lo que se llama perspectiva de género y al uso de la legitima defensa, de las mismas palabras de Gina y las pruebas que se pudieron colectar, daba cuenta que corría riesgo su vida y la del bebé que llevaba en ese momento. Esto es en los tres planos en la que el juicio ha transitado”, manifestó Ariznabarreta.

Una vez que se lean los fundamentos el próximo viernes, el letrado adelantó, “en mi caso apelaré ante el Superior Tribunal, que no se haya atendido la cuestión de la legitima defensa de ella, que la exime de la responsabilidad penal por lo tanto debió haber sido absuelta. De ahí en más el Superior tribunal debe resolver esto conforme a los criterios que entienda, pero, aun así, si fuera un revés para la defensa, queda como instancia la Corte Suprema de la Nación”.

En esa línea, contextualizó esa última instancia, “entendiendo que están en juegos los valores que comprometen al Estado Nacional, que suscribió al tratado de Derechos Humanos que protege expresamente los derechos de las mujeres en situación de vulnerabilidad, obviamente que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, seria ahí recién la última instancia de tratamiento de esta aprueba, así que falta mucho todavía”.

Por último, sostuvo que Cárdenas fue víctima de una ´violencia estructural´, “este si es un caso de violencia de género y la voy a sostener más allá de mi condición de hombre. Es una violencia estructural, desde chiquita vivió la violencia institucional porque recorrió espacios de alojamientos por haber sido víctima de situaciones complejas. El Estado la internó por órdenes judiciales en lugares que no le daban la protección que correspondía, después estuvo internada en espacios de salud mental, estuvo internada en espacios por sus adicciones, luego estuvo presa por una circunstancia de robo. Estas situaciones tienen que ver con una historia de vida, y nuestra provincia tiene muchas historias como las de Gina, algunas llegan al delito, otras no, pero son víctimas toda su vida de abuso institucional, laboral, de abuso judicial, de abuso policial y de abuso de hombres”.