Según datos abiertos del Ministerio de Salud de la Nación, se descartarán las vacunas que vencieron desde el inicio del programa de inmunización en nuestro país por el Covid-19, como así también las restantes que caduquen el próximo mes de marzo.

Vale recordar que en Argentina se aplicaron más de 113 millones de dosis contra el coronavirus, y poco más de 10.000.000 de sueros fueron distribuidos a las provincias, en espera de ser aplicados.

Asimismo, desde diciembre de 2020, momento en que comenzó la campaña de vacunación con las Sputnik-V rusas, vencieron en todo el país 1.107.742 dosis, indican los datos oficiales.

Ante el fuerte aumento de casos que se registró en el país, los documentos revelan que la cartera que conduce Carla Vizzotti poseía hasta el 19 de diciembre de 2022 unas 3.927.760 vacunas en sus depósitos, de las que 879.020 vencerán entre el 16 de enero y el 28 de febrero. En otras palabras, el 22,38% de lo disponible caduca dentro de tan solo un mes y medio.

A su vez, 2.141.500 vencen entre el 8 y el 11 de marzo próximo, esto es el 54,52% del stock en los sitios de almacenamiento del Ministerio de Salud de la Nación, aporta el sitio nortecorrientes.

Por último, 901.440 caducarán en junio de este año.

De los papeles surge que el 31 de diciembre de 2022 vencían 5.800 vacunas Pfizer pediátricas, pero los datos públicos del Ministerio de Salud no permiten identificar si estas dosis fueron o no suministradas antes de esa fecha.

Un dato no menor es que, de las casi 4 millones de vacunas en stock que aún no se distribuyeron a las provincias, más de la mitad (2.141.500) corresponden a dosis pediátricas que vencen en marzo de este año. Son sueros adquiridos al laboratorio Moderna.

El 5 de enero pasado, con Vizzotti a la cabeza, el Consejo Federal de Salud acordó iniciar la aplicación del primer refuerzo en niños y adolescentes.

A mitad de 2022 el Ministerio de Salud de la Nación informó, a través de un video en las redes sociales, que de acuerdo a información proporcionada por los laboratorios la fecha de caducidad de las vacunas puede extenderse hasta seis meses más.

"Hay un mecanismo para saber si la vacuna sigue siendo la misma después de la fecha de vencimiento. A medida que pasa el tiempo el laboratorio sigue haciendo pruebas de estabilidad de los primeros frascos que dejó sin abrir, si la vacuna conserva sus propiedades presenta sus datos a las entidades regulatorias para extender las fechas de vencimiento. O sea que si la vacuna, a los 12 meses de producida es la misma que en el momento en que se elaboró, la fecha de vencimiento -que era originalmente de 6 meses- se extiende seis meses más", informó la cartera de Salud.