En el caso de que las elecciones presidenciales de octubre conduzcan a un balotaje, la definición podría resultar en un giro inesperado
En el caso de que las elecciones presidenciales de octubre conduzcan a un balotaje, la definición podría resultar en un giro inesperado.
En una encuesta realizada por D’Alessio IROL y Berensztein, se observó que el 32% del electorado prefiere que otros dirigentes (distintos a Macri y a Cristina) definan la elección.
Este dato podría significar una gran ventaja para las opciones fuera de la grieta, como Massa y Lavagna, que defienden la integración de un frente político alternativo. Ante Macri y Cristina, que ya tienen una imagen desgastada por sus anteriores mandatos, la consistencia de una tercera opción dependerá del armado electoral.
En esa línea, sólo el 19% de los votantes manifestó que quiere una segunda vuelta entre Macri y Cristina, mientras que el 29% prefiere que sea otro candidato el se enfrente al actual presidente.
Asimismo, en el informe se evidenció que, mientras la candidatura de Macri es segura para el electorado (75%), la de Cristina aún está por verse. Cerca del 40% no sabe si la senadora se presentará finalmente en las elecciones.
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