Verónica Andino, mamá de Lautaro, publicó en su página de Facebook un relato, reflejando la situación que atraviesa la familia, y allí dice que “Son casi las 5 de mañana, va terminando la tercera noche con Lauti en una cama de guardia en el Hospital Italiano y yo sentada, como puedo, en una silla de plástico a sus pies. Sólo se escuchan las corridas, los gritos, la desesperación por cuidar la vida”.

Después cuenta que “Lauti tiene una deficiencia de sodio que no logran compensar, tampoco encuentran las razones de este déficit, aunque en un paciente con un tumor cerebral desde hace 23 años, y con todas las complicaciones que ha tenido, pueden ser muchas y todas las posibilidades ponen en riesgo su vida. Sí, ponen en riesgo su vida, una vez más”.

Más adelante advierte: “"No hay camas para internar pacientes de OSEF" me dijo un doctor después de 48 horas de angustia y espera. "No la vamos a echar, pero tampoco va a tener prioridad para subir a internación"”, señala su escrito.

La mamá manifiesta en su crónica: “No tengo palabras para expresar lo que siento, sólo sé que se me estruja el alma cada momento que lo veo sufrir”.

“No sé si serán las autoridades del Hospital Italiano, o las autoridades de OSEF o del Ministerio de Salud de la provincia quienes deberán accionar para que Lautaro tenga la atención que necesita. Sólo pido un poco de humanidad”, expresa la mujer.

Finalmente dice: “Se la debemos a Lauti, a su fortaleza, a sus ganas de vivir, a la firme voluntad que tiene de seguir para adelante a pesar de todo. Le debemos a Lauti honrar "esa vida" que a él le cuesta tanto mantener”, concluye el escrito.