El 15 de mayo de 1984 el avión Lear Jet 35 A, de la Gobernación de Tierra del Fuego, cayó a las frías aguas del canal Beagle. En el trágico accidente murieron 12 personas: el entonces gobernador, Ramón Trejo Noel; su esposa, parte de su gabinete y la tripulación.

El Juez Dr. Ernesto Löffler brindó una emotiva entrevista donde recordó a su padre el médico y Legislador Territorial de ese momento, Ernesto Julio Löffler, quien perdiera la vida en el accidente aéreo.

“El gobernador Ramón Trejo Noel fue recibido por el presidente Raúl Alfonsín y el Ministro de Interior, Tróccoli, a los efectos de trabajar básicamente en proyectos que el gobernador había diseñado para Tierra del Fuego. Entre ellos lo vinculado a la Ley de promoción económica 19.640 y otros proyectos de desarrollo para nuestra provincia” empieza su relato el Dr. Löffler en una entrevista con el programa Un Gran Día de Radio Fueguina.

Después de esa importante y fructífera reunión, el Lear Jet retornaba con la comitiva de funcionarios desde Capital Federal rumbo a la ciudad de Ushuaia, previa escala en Río Grande. Cuando la aeronave estaba en zona para su aterrizaje en nuestra ciudad, uno de los hijos del gobernador, Luis Tachi Trejo bajó con su esposa. Embarcaron en el mismo vuelo Roberto Campanella, Pedro Altuna, Ernesto J. Löffler y Norma Ormiston.

“Al llegar el Lear Jet a Río Grande, descendió el hijo del gobernador Tachi Trejo, y en su lugar el gobernador lo invitó a mi papá. Él ya tenía despachado su equipaje en LADE, era legislador y viajaba desde Rio Grande a Ushuaia en un vuelo regular. El gobernador lo invitó a viajar junto al resto de su gabinete, mi papá accedió. Los maleteros le sacaron las valijas del avión de LADE y las colocaron en el Lear que despegó.” indicó el Dr.

La nave despegó a las 16.20, a las 16.38 el copiloto avisaba que estaban a punto de comenzar el descenso. Alberto Pérez, miembro de la tripulación, operaba desde tierra dando el ok para el aterrizaje, que sería como cualquier otro. A las 16.42 el avión estaba oficialmente en emergencia.

“Lamentablemente llegando y a los pocos minutos de aterrizar en Ushuaia tuvo un accidente, el tiempo estaba muy malo nevada muy copiosamente a esa hora” indicó.

Al mismo tiempo Löffler mencionó que minutos previos al accidente había aterrizado otro avión de la gobernación; el Arava, “y el Lear no llegó” expresó. “Se accidentó a metros de la Isla Bridge, se declaró en emergencia y comenzó la búsqueda a las 16 horas aproximadamente”.

Primera pista: En cuanto las condiciones climáticas lo permitieron, comenzó una incesante búsqueda terrestre, aérea y marítima, llevada a cabo por la Armada Argentina, la Prefectura Naval, la Policía Territorial y Defensa Civil, entre otros. El buzo profesional radicado en Ushuaia, Héctor Elías Monsalve exploró por dos semanas las heladas aguas del canal.

“Lo buscaron durante muchos días hasta que un buzo centollero que estaba pescando en el Canal del Beagle, encontró rastros del avión dio la información y pudieron reflotar los restos del avión. Ya habían pasado como 15 días del accidente, en ese momento yo estaba estudiando en Comodoro Rivadavia, en el Liceo Militar Gral. Roca, estaba en quinto año y tenía 16 años. Loli mi hermano tenía 15, estaba en tercero y Pablito tenía 13 años, estaba en primer año” relató.

Al mismo tiempo, Löffler, recordó el momento cuando le contaron la noticia de la desaparición de la aeronave, estaba junto a sus hermanos. “Me llamó la atención porque alrededor de las ocho de la noche, el director del liceo nos llamó a los tres (hermanos), estábamos comiendo en ese momento. Caminando por los pasillos largos del Gral. Roca les dije a mis hermanos “seguro que falleció la abuela”, porque teníamos a la mamá de mi papá muy delicada de salud en ese momento”.

Y continuó explicando “cuando llegamos a la dirección estaban mis tutores y el director que nos dijo que había ocurrido un accidente, dijo que desapareció el Lear Jet de la gobernación con mi papá abordo. Dijo que lo estaban buscando y que nos iban a trasladar en un avión de la Fuerza Aérea al otro día. Viajamos hacia Rio Grande con un equipo de la fuerza que había sido destinado a la ciudad de Ushuaia para su búsqueda”.

Angustioso al recordar aquel momento, refirió “me acuerdo que escuchaba las distintas hipótesis como la posibilidad de haber aterrizado en otra pista alternativa. En ese momento nadie pensó que se había accidentando. Nos dejaron en Río Grande, ellos continuaron hacia Ushuaia y como dije, el avión fue encontrado mucho tiempo después”.

No obstante, la familia nunca había perdido la esperanza a pesar de los días y las semanas que habían pasado. “Un amigo de mi papá, el entonces gerente del banco hipotecario, vino y nos dijo la verdad, lo que nadie nos quería decir, que se había accidentado y que estaban todos los tripulantes, pilotos y pasajeros del avión muertos”.

Al final de la nota, el Dr. Ernesto Löffler se quebró de la emoción y sólo atinó a decir “a partir de eso nos quedó el gran recuerdo de mi papá, la verdad que tuvimos el acompañamiento de mucha gente en ese momento que nos apuntaló. Nos quedó el recuerdo de esos hombres que dieron su vida por el cumplimiento del deber”.

Destacó también el ejercicio del entonces gobernador de la provincia, Ramón Alberto Trejo Noel. “Muchos de los proyectos que traía para concretar el gobernador, después se hicieron realidad, como la ampliación de la Ley de Promoción, la ampliación del Puerto de Ushuaia, la construcción de un nuevo aeropuerto que era tan necesario en Ushuaia, la creación del banco territorial y muchas tantas cosas que hoy vemos materializadas”.

“Hoy se cumplen 36 años de esa desaparición triste de Trejo Noel, de su esposa, parte de su gabinete, los pilotos. Gente muy querida de nuestra provincia, queremos que esté presente el recuerdo de ellos y del legado que nos dejaron” manifestó.

Visiblemente conmocionado, el hijo del reconocido médico y legislador fallecido, finalizó su relato diciendo, “las enseñanzas que nos dejó el viejo fueron muy buenas, siempre nos dio muy buenos concejos. Nos orientó a estudiar, a sacrificarnos, a tener disciplina. Ahora está el legado ahí, el legado del viejo y de Ramón Trejo Noel que son parte de la historia, fue el primer gobernador que después del advenimiento de la democracia marcó un rumbo recordándolo hoy con la grandeza que se merece, y a mi viejo también”.