El fin de semana extra largo de cuatro días fue una oportunidad para que cientos de argentinos cruzaran a Punta Arenas en busca de mejores precios en indumentaria, útiles escolares y otros productos. La presencia de vehículos con patentes extranjeras y familias cargadas con bolsas fue una postal repetida en la Zona Franca, el mall y la céntrica calle Bories.

El feriado de Carnaval en Argentina, que se extendió al lunes 3 y martes 4 de marzo, incentivó esta estampida de compradores hacia el comercio chileno, donde encuentran precios más accesibles en comparación con los de su país.

No solo los comercios locales se beneficiaron con la llegada masiva de turistas, sino también los hoteles, hostales y restaurantes, que registraron un incremento en la demanda durante estosdías.