En la esquina de Alberdi y Fagnano, la histórica Despensa El Sol celebra hoy sus 70 años de trayectoria. Fundada en 1954, este tradicional comercio ha sido testigo de la evolución y crecimiento de Río Grande, y mantiene vivas las costumbres y la calidez de un negocio familiar de barrio.

Rosa, una de las propietarias actuales, quien comenzó a trabajar en la despensa en 1978, compartió sus recuerdos y emociones en este aniversario especial. Recordó a los fundadores del negocio, José María Ojeda Soto y su esposa Otilia, destacando el legado que dejaron y la conexión que mantienen con la comunidad. "Siempre los recordamos con mucho amor porque estuvimos muchos años juntos. Este negocio ha pasado por generaciones y sigue siendo un lugar importante para la comunidad", comentó Rosa.

A lo largo de estas siete décadas, Despensa El Sol ha sido más que un almacén para sus clientes. En un sector del casco viejo de la ciudad, la despensa continúa brindando atención cercana y productos de calidad. “Nuestra clientela es fiel y muchos nos acompañan desde hace años. A pesar de que algunos ya no están, siempre vienen vecinos y amigos, especialmente por nuestras milanesas, que son muy reconocidas en la ciudad”, expresó Rosa con una sonrisa.

La despensa, además de conservar su espíritu familiar, ha pasado por los desafíos económicos del país y de la región. "Estamos pasando un momento difícil, pero continuamos adelante gracias a nuestros clientes y al amor que le ponemos a nuestro trabajo cada día", aseguró.

Para la comunidad de Río Grande, Despensa El Sol es un símbolo de tradición y constancia, y sus actuales encargadas, Rosa y Mónica, junto con la ayuda de un joven en las tardes, mantienen viva la esencia de este querido almacén de barrio. En su 70º aniversario, la despensa sigue firme, recordando a quienes formaron parte de su historia y agradeciendo el apoyo de sus clientes, a quienes Rosa dedica sus mejores deseos y bendiciones.

¡Feliz aniversario, Despensa El Sol!