En el marco del Día Internacional de la Persona con Discapacidad que será este domingo 3 de diciembre, el director del Centro de Actividades Alternativas para Personas con Discapacidad (CAAD), Marcelo Saldivia, habló sobre el acto que realizarán los alumnos que asisten a la institución, el cual iniciará a las 15:00h del domingo y será afuera de las instalaciones de la Radio Nacional sito en la calle Fagnano esquina Rosales, donde también habrá bailes, música y una banda en vivo. Además, Saldivia profundizó en los distintos aspectos que le falta a la sociedad riograndese a la hora de incluir a las personas con distintas discapacidades.

A través de una comunicación que mantuvo con FM Del Pueblo, el director del CAAD, Marcelo Saldivia dijo que el domingo “vamos a estar haciendo un pequeño acto por el Día Internacional de las Personas con Discapacidad donde va a haber un poco de danza, algo de música y va haber una banda tocando ahí. La idea es homenajear y recordar a las personas con discapacidad que nos hacen por ahí ver la vida de otra forma, pensando por ahí en la inclusión y en que sean valorados, tenidos en cuenta como personas útiles a la comunidad y a la sociedad, que es lo que son. Por ahí nos queda recorrer un largo camino para poder que sean realmente incluidos en todos los ámbitos de la comunidad”.

En este aspecto, Marcelo Saldivia profundizó en la inclusión y como la sociedad acepta e incorpora a las personas con distintos tipos de discapacidades “creo que nos falta un largo camino por recorrer, por ahí por el miedo de las personas también por relacionarse con una persona con discapacidad. Nosotros desde el CAAD creemos que cada individuo es particular, cada uno tiene su potencial y su granito de arena para dar a la comunidad. Entonces es importante que tengamos en cuenta cada una de las acciones y cada una de las cosas que puedan hacer las personas con discapacidad, que son un montón, pero también tener en cuenta lo valiosas que son porque nos están demostrando que con alguna patología o con alguna cuestión física motora se pueden hacer un montón de cosas y los que nos creemos normales o neurotípicos, por ahí nos fijamos en un montón de cuestiones cuando hay otras personas que están en otra situación y logran muchísimas más cosas que nosotros los que nos creemos normales”, sostuvo.

“Entonces por ahí ese sería el mensaje, tener en cuenta que ellos pueden dar un montón, no ver a la persona con discapacidad sino el nombre, Marcelo, Juan, Pedro, el nombre que tenga con una discapacidad. Eso debe ser algo que no debe ser tomado en cuenta y tomado como importante al momento de conocer a la persona, sino conocerla como es y cómo puede mostrarse en la comunidad sin tapujos, pero esa es la idea, poder tener libertad, que puedan ser libres, que puedan trabajar, que puedan tener su familia que puedan tener una vida común y normal como las tenemos todos”, agregó Saldivia.

Por lo cual, el director del CAAD remarcó que para poder lograr esta inclusión de la que mucho se habla también se debe tener en cuenta “esto de tratarlos de igual forma que a otras personas y si ellos te necesitan ayuda, cualquier persona con cualquier discapacidad te la va a pedir en la medida de sus posibilidades, pero por ahí tiene que ver con esto de que como sociedad debemos recibir a las personas con discapacidad y nosotros adecuarnos a la realidad de ellos, y no es adecuarse a la realidad de la comunidad que no haya separaciones ni diferencias”.

También indicó que en Río Grande “todas las instituciones que trabajan con personas con discapacidad, que por suerte son varias las que hay en la comunidad, tratamos de visibilizar esto de cómo ayudar a una persona con discapacidad cuando te pide ayuda porque no todos estamos capacitados o no todos tenemos las herramientas, eso es lo que tenemos que hacer, es visibilizar y también concientizar, y también ayudar a que puedan”.

En este punto, también hizo hincapié en la forma apropiada de ayudar a una persona con discapacidad y dijo “hay personas que no ayudan a una persona a cruzar la calle porque no saben cómo llegar o cómo arribar, pero hay formatos de cómo se coloca el bastón, de cómo se acomoda esa persona, para que está dando una señal o un signo de que vos le podés dar una mano, tiene que ver con eso, de ponernos en un lugar del otro, empatía y decir ¿te puedo ayudar? ¿necesitas ayuda? De última te va a decir sí y no, pero no puedes agarrar a una persona en una esquina y cruzarla sin hablarles y sin permiso, como nos pasa a cualquiera, si alguien le quiere tocar es como que tiene que ser algo consentido, pensar en eso como un disparador y así con todas las personas con discapacidad”, remarcó.

En esa misma línea, puntualizó en otro tipo de patologías que no se ven y se manifiestan de distintas formas, y sostuvo que “también tenemos que aprender a respetarlas, por ahí tenés un niño en un supermercado que está haciendo un berrinche y quizás es un niño con TEA o con Asperger, no es un niño mal educado, mal criado, como por ahí lo veíamos como cuando éramos más chicos. Ese niño que hacía toda esta situación, es un nene que se está adecuando a la vida y que ve y siente diferente, entonces le pasan estas situaciones. Por ahí comprender y entender y preguntarle por ahí a su familia si necesita ayuda porque no es simplemente un capricho, sino capaz que está pasando por una crisis”, explicó.

Tras ejemplificar todas estas situaciones que se presentan de forma cotidiana, Marcelo Salvidia consideró que toda la comunidad debería “entender todas estas cuestiones y ponerte en el lugar de nosotros y de las otras personas, porque son situaciones que hoy nos atraviesan. Por suerte las vemos más seguido en los diferentes lugares, porque las familias hoy sacan a sus hijos, no como por ahí como contabas algunos años atrás, son tantos que decían “este que es el enfermito”, no salía o no lo llevaba. Hoy por suerte cada vez estas posibilidades son más amplias y la gente puede salir y mostrar a su persona, a su hijo con discapacidad, porque lo tenemos que pensar como un hijo más, no como algo diferente”, concluyó el director del CAAD.