El mercado inmobiliario en Río Grande presenta una realidad compleja, tanto para quienes buscan alquilar como para quienes desean adquirir una propiedad. En una entrevista reciente Mauricio Saavedra, presidente del Colegio de Martilleros y Corredores de la ciudad, analizó los principales factores que inciden en los costos y la disponibilidad de viviendas.

Mauricio destacó que el valor del metro cuadrado de construcción oscila entre los 900 y 1,000 dólares, dependiendo del tipo de material y mano de obra. Esto significa que una casa estándar de 80 metros cuadrados puede costar alrededor de 80,000 dólares, sin contar el valor del terreno, que varía entre 15,000 y 20,000 dólares.

"El precio de construcción es el mismo en cualquier barrio, lo que varía es el valor de la tierra. Barrios tradicionales como el centro o el Mutual son los más buscados, lo que incrementa su valor. Además, el precio de reventa depende en gran medida de la ubicación", explicó Saavedra.

En cuanto a los alquileres, Mauricio señaló que los costos también son elevados. "Para ingresar a alquilar una casa de dos dormitorios, una familia debe contar con al menos 1,350,000 pesos, lo que incluye el primer mes de alquiler, el depósito de garantía y los honorarios profesionales". Sin embargo, debido a la reciente flexibilización de la ley 27.551, se han abierto más posibilidades para negociar pagos en cuotas, facilitando el acceso para muchas familias.

Saavedra también destacó un aumento en la oferta de viviendas en venta en comparación con el alquiler. Esto se debe, en parte, a la decisión de algunos propietarios de regresar a sus lugares de origen, lo que ha generado un cambio en la dinámica del mercado. "Hay más casas en venta que en alquiler, y muchas operaciones se realizan de forma directa entre propietarios y compradores, aunque siempre recomendamos contar con un profesional para asegurar una operación segura y sin contratiempos", afirmó.

El fenómeno de los precios elevados, según el martillero, se explica muchas veces por la falta de asesoramiento. "Nos encontramos con propiedades que tienen un precio muy por encima de lo que realmente valen. Los propietarios suelen asignar un valor sentimental, sin tener en cuenta el valor real de mercado, lo que dificulta la venta o el alquiler".

En resumen, el mercado inmobiliario de Río Grande enfrenta desafíos relacionados con los altos costos de construcción, alquiler y venta, pero también ofrece oportunidades para quienes buscan negociar mejores condiciones. Los barrios más tradicionales siguen siendo los más demandados, y la flexibilidad en los contratos se presenta como un alivio en medio de un contexto de precios elevados.

Mauricio Saavedra concluyó la entrevista con una recomendación clara: "El mejor camino para asegurar una buena operación es contar con el apoyo de un martillero o corredor matriculado. Así se garantiza tanto la legalidad como la tranquilidad de ambas partes".