Durante la mañana de hoy, trabajadores de la empresa BARPLA se concentraron frente al Ministerio de Trabajo de la Provincia en reclamo de una intervención que destrabe el conflicto laboral que mantienen con la empresa. Minuto Fueguino entrevistó a Germán Resquín, delegado de la Asociación Obrera Textil (AOT), quien expresó la frustración de los trabajadores ante la falta de respuestas efectivas y la incertidumbre que enfrentan.

Resquín explicó que los trabajadores solicitaron una conciliación obligatoria de urgencia al Ministerio de Trabajo, para que se ponga fin al conflicto que, según él, ha sido prolongado intencionalmente por la empresa. "Le exigimos a la Ministra, a Castiglione, que tome la decisión correcta a beneficio de cada trabajador. La incertidumbre y el juego entre empresarios y Estado ya no es viable para los trabajadores", señaló el delegado.

Uno de los puntos que más molestia ha generado entre los empleados es la reciente propuesta de pago, que implicaba un supuesto aumento del 100% en cuotas. Sin embargo, esta propuesta fue modificada y reducida en un 40%, lo que Resquín calificó como "un 100% mentiroso". "Estamos cansados de este abuso y del juego sucio que vienen haciendo los empresarios. Vamos a luchar hasta la última consecuencia", agregó.

Los trabajadores también denunciaron que la empresa está jugando con la necesidad económica de los empleados, ofreciendo condiciones que afectan significativamente sus ingresos. Resquín estimó que cada trabajador podría perder alrededor de 10 millones de pesos en esta reestructuración propuesta, lo cual afecta duramente a quienes llevan décadas de servicio en la planta.

El delegado manifestó además que los empleados han solicitado al Gobierno provincial que garantice su estabilidad laboral, con el respaldo del Ministerio de Trabajo y otras autoridades. Frente a la posibilidad de que el conflicto continúe sin solución, Resquín adelantó que están dispuestos a judicializar la situación si no reciben una respuesta favorable en breve.

El reclamo de los trabajadores también incluye una propuesta para que las plantas sean operadas bajo control de los trabajadores, permitiendo que ellos mismos gestionen y se beneficien de las ganancias. La situación crítica que enfrentan, junto a la incertidumbre generada por el incumplimiento de la empresa, ha llevado a los empleados a considerar esta opción como una alternativa viable para garantizar su sustento y estabilidad laboral.