Ivana Daher es una vecina de Río Grande que desde hace muchísimos años viene reclamando el acceso a una solución habitacional por parte del IPVyH, y se acercó ayer al instituto a realizar una manifestación.

Al respecto, comentó que “hoy hay muchos alquileres liberados por la gran cantidad de aumentos. Costaba mucho conseguir alquiler y yo tenía que irme de donde estaba y como no tenía dónde ir, y desde la pandemia no conseguí un trabajo estable.”

A raíz de esta situación, “como no tenía antigüedad laboral, me costaba mucho conseguir un alquiler que acepte chicos y con garantes. Estuve en situación de calle y ya me hospedé con Desarrollo Social y ya pasé por esto, pero no a este punto crítico porque antes tenía la opción de volver de forma momentánea a lo de madre. Antes de que nazca mi bebé conseguí alquiler y me quedé ahí hasta abril de este año. Lamentablemente me quedé sin trabajo en la fábrica y empecé a buscar un nuevo trabajo que no conseguía. De alguna manera seguía abonando el alquiler, pero tenía un contrato viejo firmado en 2022 y el aumento es anual según el índice inflacionario y este año se me iba a una suma muy elevada que no iba a poder pagar, con lo cual, decidí irme hasta poder solucionar mi situación.”

“Volví a la casa de mi madre con mis hijos y con un embarazo de seis meses y no pude retomar la actividad laboral porque estaba embarazada y tengo que esperar que nazca para retomar la búsqueda.”

Ivana relató que “nací acá y me anoté en el 2013 en el IPV y como hay que esperar, todos los años voy y renuevo mi legajo. Uno conoce la demanda que hay y sabe cómo es el sistema, pero me dijeron que no hay posibilidad ante el reclamo y me hizo una entrevista la asistente del IPVyH y me dijeron que no hay cupos, no hay nuevas obras y hay mucha gente en la misma situación que yo. Mi situación es crítica porque no tengo a dónde ir. Tiene que haber algún cupo para estos casos como el mío.”

Además, denunció tomar conocimiento de “una persona que se inscribió en el 2021 y le entregaron una vivienda este año, cuando hay vecinos que están hace 20 años esperando una vivienda. En noviembre del año pasado, una persona no residente de la isla llegó y en enero de este año ya le entregaron una casa.”

Finalmente, sostuvo que seguirá yendo todos los días al IPVyH para seguir haciendo visible su reclamo.