En el marco de una entrevista realizada al profesor e instructor de kayak, Augusto Caballero, se puso de relieve la relevancia de esta disciplina en Ushuaia, una ciudad costera cuyo entorno natural invita a la práctica de actividades al aire libre. Con una trayectoria que combina la enseñanza y la pasión por el kayakismo, Caballero compartió su experiencia y visión sobre este deporte, que cada vez atrae a más personas interesadas en explorar los paisajes fueguinos desde el agua.

Augusto Caballero es prácticamente un "hijo adoptivo" de Ushuaia, como él mismo lo señala, dado que llegó a la ciudad siendo muy joven junto a su familia. Desde su adolescencia, se sintió atraído por el kayak a través de las actividades deportivas en el colegio. "En el secundario, a través del deporte escolar, comencé con lo que es el kayak, y toda mi vida kayakista la viví dentro del Club AFASyN", recordó Caballero, quien hoy se desempeña como profesor en este club, ofreciendo clases y capacitaciones en distintos niveles.

El Club AFASyN, una institución con una sólida trayectoria en el fomento de deportes acuáticos, ha sido el lugar donde Caballero ha desarrollado gran parte de su carrera como instructor. Allí, realiza cursos para personas de todas las edades y niveles, desde quienes se acercan por primera vez a esta actividad hasta aquellos con experiencia que buscan perfeccionar su técnica. "Tenemos cursos de iniciación para quienes nunca han hecho kayak, y también niveles intermedios y avanzados", explicó el instructor.

A menudo, muchas personas que consideran practicar kayak se preguntan sobre las exigencias físicas que implica. Augusto fue claro en este punto, destacando que es una actividad accesible para casi cualquier persona, siempre y cuando se cuente con una capacidad física mínima. "No es necesario ser un atleta. Lo que se recomienda es que quienes lo practiquen puedan realizar actividad física sin mayores complicaciones", detalló.

Una de las ventajas del kayak, en comparación con otros deportes, es que es de muy bajo impacto, lo que lo hace ideal para personas con problemas articulares. "Es una actividad aeróbica y sin impacto, lo cual la convierte en una opción excelente para personas con complicaciones en rodillas o tobillos, ya que no genera estrés en esas articulaciones", explicó Caballero, quien lo comparó con otras disciplinas como la natación o el ciclismo, que también son recomendadas por su bajo riesgo de lesión.

El kayak no solo ofrece beneficios físicos, sino que también es una actividad muy relajante, algo que Augusto resaltó con entusiasmo. "El desestrés que produce es impresionante. Al principio, te puede dar un poco de miedo estar sobre el agua, pero una vez que lo superás, te sumergís en un disfrute total y te vinculás de manera única con la naturaleza", comentó el instructor.

La modalidad que más se practica en Ushuaia es el kayak de travesía, que permite a los aficionados recorrer largas distancias por el Canal Beagle, apreciando paisajes de montaña y costa que de otra forma pasarían desapercibidos. Esta actividad es bastante diferente a la que se ve en ríos y rápidos, como aclaró Augusto: "El kayak de travesía tiene más analogía con el trekking de montaña; te desplazás de un lugar a otro y podés interactuar con la naturaleza. Estas embarcaciones son más largas, miden entre 5 y 6 metros, y permiten cargar equipamiento para travesías más largas", explicó. Esto hace posible realizar recorridos de varias horas o incluso de varios días, llevando todo lo necesario a bordo.

Aunque el kayak de travesía puede tener algunos riesgos, estos se minimizan respetando los reglamentos y controles que establecen las autoridades, especialmente la Prefectura. "Hay lugares donde podemos salir a navegar libremente y otros donde es necesario contar con permisos específicos, pero en general la actividad está muy bien regulada", afirmó Caballero.

Más allá de su labor en el Club AFASyN, Augusto decidió llevar su pasión por el kayak un paso más allá, fundando Ushuaia Sea Kayak, un emprendimiento orientado tanto a turistas como a residentes locales que desean explorar las costas fueguinas desde el agua. "No todos quieren hacer un curso o aprender en profundidad la técnica. Hay gente que simplemente quiere salir a dar una vuelta en kayak por la bahía, disfrutar del paisaje y ver la ciudad desde otra perspectiva", comentó Caballero.

Este proyecto, cuyo nombre en inglés significa "Kayak de mar", ofrece salidas cortas y guiadas que permiten a los participantes disfrutar de la naturaleza de Ushuaia de una manera única. "El kayak de mar o de travesía es ideal para quienes buscan una experiencia tranquila, sin las exigencias técnicas que tiene el kayak en ríos o rápidos", señaló el instructor.

Para quienes quieran adentrarse en el mundo del kayak, Augusto Caballero ofrece clases a través del Club AFASyN, donde pueden inscribirse para cursos de todos los niveles. "Pueden contactarse por mail o a través de Instagram en @ushuaia.seakayak, donde les brindamos toda la información sobre las salidas y los cursos", informó el instructor.

Con su vasta experiencia y su enfoque inclusivo, Caballero ha logrado acercar el kayak a un amplio público en Ushuaia, promoviendo una actividad que no solo ofrece beneficios físicos, sino también la posibilidad de disfrutar de la naturaleza fueguina desde una perspectiva privilegiada. "Es una pasión que, además de ser accesible, te permite conectarte con el entorno de una forma muy especial", concluyó.

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Instagram: @ushuaia.seakayak