El secretario general del Centro de Empleados de Comercio de Río Grande, Eusebio Barrios, fue consultado por Radio Universidad 93.5 sobre la intención del supermercado La Anónima de prescindir de cien trabajadores, 60 en Río Grande y 40 en Ushuaia, y aseguró que luego de dar a conocer esta información “no tuvimos más charlas. La Anónima no llamó más porque dijimos a todo que no y no tenemos otra novedad. En estos días vamos a hablar para ver cómo van a pagar los bonos”, adelantó.

“Vamos a presentar una nota sobre esto pero no tenemos novedades sobre el congelamiento que querían hacer. Luego de que se conoció la noticia no hubo avance ni otra propuesta”, sostuvo. Cabe recordar que en Ushuaia el gremio aceptó el congelamiento de sueldos, pero fue rechazado en Río Grande. “Nosotros no vamos a aceptar ningún tipo de congelamiento de sueldos y todo lo que tenemos con La Anónima lo hemos conseguido a través de paros, de movilizaciones. Nos costó mucho trabajo y no queremos que nos congelen nada”, sentenció.

“Los problemas nuestros empezaron el año pasado cuando pedimos la actualización de los bonos que se habían firmado con el Ministerio en paritarias. El año pasado los congelaron, no se actualizó y por eso vinieron los problemas y hubo despidos. Ahora queremos saber qué va hacer La Anónima con los bonos de fin de año”, expuso.

Respecto de Carrefour, informó que “sigue sin ningún tipo de novedad, y ellos pagaron el año pasado los bonos actualizados con las paritarias”.

Buenas perspectivas

Con la extensión de horarios de atención y reaperturas de nuevos rubros, “hay una buena expectativa, los comercios están trabajando casi en forma normal, no sé si con el 100% de los empleados por la cantidad que están aislados por los contagios, pero no tenemos quejas y creo que vienen bastante bien”, evaluó.

“Nosotros pensamos en positivo, esperamos que esto siga avanzando, que se mantenga el trabajo. Ya a partir del 18 de diciembre cierran casi todas las fábricas, se van de vacaciones y después no sabemos qué va a pasar en enero y cómo va a estar la situación en Tierra del Fuego. Este año no ha sido bueno ni para el empleador ni para el empleado, ha estado muy difícil para todos”, dijo.

Paritarias ratificadas

También dio detalles del acuerdo paritario ratificado a nivel local, en sintonía con las paritarias nacionales. “Los 4 mil y los 2 mil pesos pasan al básico, el sueldo de septiembre arranca con un retroactivo de 1.200 pesos, en octubre se dieron otros 1.200 y a partir de noviembre van a cobrar el complemento regional de 3.660 pesos más los 5 mil del bono que se firmó en Buenos Aires, que son 30 mil pesos divididos en seis cuotas, en este caso todo no remunerativo. Esto va hasta marzo inclusive. Son montos fijos y no hay un aumento por porcentaje, pero más o menos anda en un 28,5%. En enero van a hacer una nueva revisión en Buenos Aires y se volverá a ver. Ahora lo que se firmaron fueron dos montos fijos no remunerativos”, aclaró.

Poniéndolo en cifras, indicó que “el sueldo de un maestranza estaba en septiembre en 70.221 y un vendedor en 73.178. En marzo va a cobrar 78 mil pesos un maestranza y un vendedor va a andar en 81.259 pesos, esto sin antigüedad. En un supermercado es distinto, porque un cajero lleva un porcentaje diferente. Igualmente nuestros aumentos siguen estando por debajo de lo que sube la inflación”, observó.

Pocos despidos, mucha ilegalidad

Si bien el dirigente aseguró que no hubo muchos despidos, “porque se cerraron comercios atendidos por sus propios dueños”, preocupa el trabajo en negro en las casas particulares.

“Hubo despidos pero no obedecían a la pandemia ni al problema que existe en el país, pero no fue una cantidad importante, deben ser 25 ó 30 en lo que va del año. Hubo muchos convenios de pago al 100% no remunerativo, y se han hecho convenios por reducción de horas, pero no hubo muchos despidos. Hay negocios en su propia casa donde tienen empleados en negro y nosotros como gremio no podemos ingresar a hacer una inspección, a diferencia de un comercio habilitado. Tampoco la Cámara de Comercio puede meterse a una casa, eso le corresponde a la Municipalidad o al Gobierno. Hay showrooms con empleados en negro en casas particulares y nosotros nos enteramos pero no podemos hacer una inspección en una casa particular”, manifestó.

Consideró que “desde el gobierno o el municipio esto lo pueden controlar porque hay un solo lugar por donde se recibe mercadería. Tuvimos la denuncia de una zapatería con dos empleados en negro, fuimos a la casa pero no pudimos ingresar. No hay nadie que esté haciendo nada con esto y perjudica al empleado que está trabajando en negro, porque no tiene nada, no tiene seguro si pasa algo. Tiene que haber un control sobre eso”, reclamó.

“La Cámara está tratando de solucionar este tema porque perjudica al que está alquilando un local, que tiene su comercio habilitado legalmente, que paga impuestos por un montón de cosas, y no hay una competencia justa”, concluyó.