
La NASA se prepara para llevar a cabo dos ambiciosas misiones espaciales con el objetivo de profundizar el conocimiento sobre el Sol y el universo. Una de ellas, denominada PUNCH, generará eclipses artificiales para observar con mayor detalle la corona solar, mientras que la otra, SPHEREx, mapeará el cosmos en longitudes de onda infrarrojas.
El lanzamiento de ambas misiones está programado para este fin de semana desde la base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California, utilizando un cohete Falcon 9 de SpaceX. Estas iniciativas buscan mejorar la comprensión del clima espacial y la evolución del universo.
PUNCH (Polarimeter to UNify the Corona and Heliosphere) estudiará el viento solar, un flujo de partículas cargadas que emite el Sol y que tiene un impacto directo en la Tierra, afectando las comunicaciones y los sistemas satelitales. Para lograrlo, empleará un cronógrafo, un dispositivo que bloqueará la luz más intensa del Sol, imitando un eclipse, y permitirá observar la atmósfera externa de la estrella, conocida como corona.
“De manera similar a un eclipse natural, en el que la Luna tapa la parte brillante del Sol y deja visible su atmósfera, PUNCH creará eclipses artificiales para analizar cómo se forma el viento solar y cómo interactúa con el espacio interplanetario”, explicó Bea Gallardo-Lacourt, científica de la NASA.
El viento solar, además de originar fenómenos como las auroras boreales, puede generar interferencias en sistemas de comunicación y afectar el funcionamiento de satélites. Con la información obtenida a través de PUNCH, los investigadores podrán desarrollar estrategias para mitigar sus efectos adversos.
Por otro lado, SPHEREx (Spectro-Photometer for the History of the Universe, Epoch of Reionization and Ices Explorer) tendrá la misión de cartografiar el universo en 102 colores distintos mediante el estudio de longitudes de onda infrarrojas. Su objetivo es analizar más de 450 millones de galaxias y 100 millones de estrellas en la Vía Láctea, proporcionando un panorama detallado del cosmos.
“Este telescopio nos permitirá estudiar la evolución del universo, desde sus primeras etapas hasta la formación de galaxias y planetas. Además, ayudará a comprender el origen del agua y otros elementos esenciales para la vida”, agregó Gallardo-Lacourt.
A diferencia de telescopios como el Hubble o el James Webb, que exploran regiones específicas del espacio, SPHEREx realizará un mapeo integral del cielo cada seis meses, permitiendo a los científicos analizar cambios en el cosmos a lo largo del tiempo.
Con estas dos misiones, la NASA busca ampliar el conocimiento sobre el impacto del Sol en nuestro planeta y desentrañar algunos de los misterios del universo, contribuyendo al avance de la exploración espacial.
Compartinos tu opinión