La iniciativa fue girada a la Comisión de Trabajo que encabeza la oficialista Juliana Di Tullio, que deberá comenzar a debatirla en los próximos días.
El proyecto tiene dos artículos (uno de ellos De Forma) y modifica la Ley de Legislación del Trabajo en lo que hace al alcance de la jornada laboral.
Aunque mantiene las ocho horas por día "como máximo" o las 48 semanales, salvo excepciones mencionadas en la legislación, establece que los empleadores no podrán enviar comunicaciones a sus trabajadores fuera de horario.
"Entre el cese de una jornada de trabajo y el comienzo de la siguiente quedará prohibido el envío de directivas, consignas y solicitudes de actividades adicionales por medios tales como correos electrónicos, mensajes u otras herramientas tecnológicas", señala la medida en estudio.
Entre los fundamentos del proyecto, Fernández Sagasti menciona que "las nuevas tecnologías en la mayoría de los casos han atado al trabajador aún más a su puesto de trabajo" y que "se torna alarmante" que se han "flexibilizado aún más las condiciones laborales de los y las trabajadoras".
"La utilización de equipos informáticos de que está dotado el trabajador fuera del horario de trabajo, puede producir, en ocasiones, una sobrecarga de información y comunicación, dañina para su vida privada: los trabajadores que se conectan a distancia, a cualquier hora de cualquier día, con el riesgo evidente de incumplir los tiempos de descanso diarios o semanales, lo que afecta de lleno la protección de sus salud, recreación y lazos afectivos", menciona la senadora oficialista por Mendoza.
Compartinos tu opinión