El agua es un servicio básico para que los seres humanos puedan subsistir. En cada nueva ciudad se requieren de agua potable para las viviendas, es por lo que en Río Grande se comenzaría a distribuir por red el 15 de marzo de 1954.
Durante la presidencia del general Juan Domingo Perón, se realizaron diversos avances tecnológicos a nivel país. Antiguamente, existían canillas comunitarias donde los habitantes extraían el agua para consumo personal, de igual manera se cavaban profundos pozos de alrededor de cuatro metros, donde el líquido surgía de las napas, como también se aprovechaba a recolectar el agua de lluvia en donde solo se necesitaba un tacho, una tela para filtrar y a esperar la lluvia, ¿o no?
Finalmente, el servicio potable comenzó a salir en las canillas de los hogares. Entre los distintos trabajos, el ministro de Obras Públicas en ese entonces Roberto Dupeyron decidió construir la torre de Obras Sanitarias inaugurada el 16 de diciembre de 1937, en conjunto con Hospital Río Grande y la Escuela n°2 “Benjamín Zorrilla”, estás formaron parte de las obras del Plan Quinquenal que se desarrollaba en ese entonces, el cual tenía como objetivo transformar la estructura económica y social.
Emplazada las calles Fagnano y Laserre frente a lo que hoy es la plaza Brown esta cambió la calidad de vida de los riograndenses, abasteciendo a más de 500 habitantes, ya que medía 18 metros de alto y tenía una capacidad de 150 metros cúbicos.
Su arquitectura se destacaba por ser el punto más alto de la ciudad y que permitía observar la Plaza Almirante Brown. Con los años los edificios ganaron en altura, pero el prestigio y su historia no sería tan fácil de quitar. Para 1970, dejó de funcionar, la población crecía cada vez más, la cantidad de agua no era suficiente, ya que el consumo para las 7.000 habitantes era sobresaliente a la capacidad que ofrecía.
Desde ese faltante, la torre se empezó a vaciar, las paredes se secaron, las luces se apagaron, los trabajadores volvieron a sus casas y las puertas se cerraron, sin saber cuándo se volverían a abrir.
En 2011, con la primera gestión del intendente Gustavo Melella, propuso resguardar y recuperar aquellos espacios de patrimonio histórico que forman parte de los inicios de Río Grande, luego de unos años se presentó un proyecto para la restauración del lugar y se puso en marcha las obras.
De esta manera, se subdividió en tres pisos: en la primera se trabajó en la planta baja y subsuelo, convirtiéndola en la nueva Oficina de Información. En el marco de los festejos del aniversario de número 93 de la ciudad, se dio por inaugurada la nueva Oficina de Turismo. Finalmente, en el 97° aniversario, se estrenó el mirador temático, allí se resguardan maquetas sobre las antiguas primeras viviendas que se ubicaban en los inicios, muestran la historia de un sector novel y lo que les permite a sus visitantes poder contrastar los avances geográficos y productivos de la ciudad realizando una mirada panorámica del afuera y ver donde es que se situaban los pasados hogares que fundaron las bases de los modernos edificios que logramos ver en la actualidad.
Este espacio se convirtió en un sitio de reunión que les permite a las nuevas generaciones conocer la historia que los convoca como fueguinos. En el último tiempo fue foco de reuniones, ya sea para manifestación, marchas y apoyo a una causa que los ciudadanos consideraron justa.
En la noche, se ilumina con diversos colores según la ocasión. En preparativos al Centenario de nuestra ciudad, se colocó en un sector a la derecha de la torre un reloj que marca una cuenta regresiva para los 100 años.
La torre se convirtió en un lugar de encuentro para manifestaciones, festejos, y hoy es un emblema de esta querida ciudad fueguina.
El patrimonio histórico de Río Grande es un sector que nos ocupa como ciudadanos, somos los seres humanos conformes de una sociedad los que marcan la historia de un pueblo. Nosotros formamos día a día la historia de un lugar y eso nos enorgullece como argentinos, hagamos un presente basándonos en el pasado y proyectándonos hacía un futuro.
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