
Aunque los pronósticos iniciales del Servicio Meteorológico Nacional auguraban una jornada con vientos extremos, Río Grande vivió un domingo más tranquilo de lo previsto. Según informó Sebastián Águila, director de Defensa Civil Municipal, las ráfagas no alcanzaron la intensidad esperada, permitiendo un desarrollo controlado de las actividades de emergencia.
El balance del día dejó unas 30 intervenciones relacionadas principalmente con cableados y estructuras afectadas por el viento. "Tuvimos más de 30 llamados por situaciones como cables caídos, postes telefónicos, carteles sueltos y portones. Lo más llamativo fue el colapso de una ampliación metálica en una vivienda del barrio CGT, que no soportó las ráfagas", explicó Águila.
Respecto a la recicladora que sufrió un incendio el pasado 4 de diciembre, se realizaron tareas preventivas. "La empresa sigue removiendo material diariamente, pero con los vientos se reactivaron pequeños focos. Bomberos trabajaron en el lugar para enfriar y apagar cualquier riesgo", detalló el director.
En cuanto a los cortes de cables y servicios, Águila mencionó que algunos sectores experimentaron interrupciones menores. "Hubo cables de Telefónica y TV Fuego afectados, además de cortes de luz en algunas viviendas, pero nada grave", comentó.
El pronóstico inicial indicaba vientos superiores a 120 km/h, con alertas que evolucionaron desde amarilla hasta roja. No obstante, las condiciones mejoraron y las ráfagas registradas estuvieron muy por debajo de lo esperado. "Por suerte, fue mucho más calmo de lo que pensábamos. El balance es positivo, ya que las emergencias fueron manejables", concluyó Águila.
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