El ámbito de la salud y el sindicalismo de Tierra del Fuego se vio sacudido por la triste noticia del fallecimiento de Luis Raña, quien murió repentinamente en Río Grande. Su partida deja una huella imborrable en la comunidad, donde dedicó más de tres décadas a la enfermería y al activismo gremial.

Durante 30 años, Raña trabajó en los servicios de Clínica y Cirugía del Hospital Regional de Río Grande, al mismo tiempo que se convirtió en una figura clave en la defensa de la salud pública desde su militancia peronista. En los últimos años, se graduó como abogado y desempeñó un importante rol como asesor gremial en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) de Río Grande.

Desde ATE expresaron su pesar por la pérdida y lo despidieron con un emotivo mensaje: "Nos duele su partida, pero su legado perdurará en cada lucha y en cada compañero que encontró en él una guía y un apoyo incondicional. Acompañamos a su familia en este momento tan difícil".

Además de su labor en el hospital y en el gremio, Raña tuvo un papel activo en la lucha contra la reforma previsional impulsada durante el gobierno de Rosana Bertone. Su compromiso con la defensa de los derechos de los trabajadores y la salud pública fue reconocido tanto por el sector sindical como por la dirigencia política local.

"Era un profesional comprometido, un defensor incansable del hospital público y de las condiciones laborales de los trabajadores de la salud. Lo recordaremos con cariño y como un ejemplo de lucha", expresaron referentes políticos de la provincia, quienes enviaron sus condolencias a su familia y amigos.

El Partido Justicialista de Tierra del Fuego también lamentó su fallecimiento y lo recordó como un compañero leal y militante comprometido. "Acompañamos a su familia y amigos en estos momentos difíciles", manifestaron en un comunicado.

Luis Raña deja un importante legado en la comunidad de Río Grande y en toda la provincia, siendo recordado por su entrega y vocación de servicio.