Los argentinos conocen bien la inflación, pero verla en perspectiva es peligroso para las emociones. Es que, entre mundial y mundial, hubo un aumento general de los precios del 674%, pero hay productos relacionados con la fiebre por el fútbol que subieron bastante más entre Rusia 2018 y Qatar 2022.

Así surge del informe de la consultora Focus Market, que analizó qué ocurrió entre mundiales con tres productos: la camiseta de la Selección, un asado para cuatro personas y una picada con la que pueden comer tres y pican seis.

“Si bien la indumentaria en los últimos cuatro años ha sido uno de los bienes que más ha aumentado la Camiseta de la Selección Nacional se ha incrementado más que el promedio de ese bien en el período. La indumentaria tuvo un aumento promedio del 780% mientras que el de la Camiseta de la Selección fue de 931%”, señala el informe.

El documento enumera razones para ese aumento: la falta de acrílico en el sector de la indumentaria, el aumento del precio del algodón, las subas en el costo de la logística internacional y la menor oferta en el mercado por el cierre de pymes textiles antes y durante la pandemia generaron un fuerte incremento en los valores de la camiseta de la Selección.

Un asado para cuatro también tuvo un incremento por arriba de la inflación acumulada. Pasó de valer $258,88 a $2792,75, con un 979% de aumento. Esa cuenta incluye 2 kilos de carne que se distribuyen entre medio kilo de asado, medio kilo de pechito de cerdo, medio kilo de pollo y medio kilo de vacío.

En cambio, el único rubro que por ahora no superó a la inflación acumulada entre el Mundial de Rusia 2018 y el de Qatar en 2022 es el de la picada. De acuerdo con Focus Market, una tabla con la que comen tres y pican seis subió 470% y pasó de $700 a $3990.

La tabla incluye jamón crudo, salame de milán, dos baguettes, jamón cocido, spianatta, queso de campo, pategrás y gruyere, y aceitunas.

La Argentina ya tiene una larga historia de inflación entre mundiales. “A fuerza de ignorar los fundamentos de la macroeconomía los incrementos en los desajustes fiscales y monetarios han llevado a una creciente inflación acumulada desde el mundial de Sudáfrica en 2010 a Brasil 2014 con 256%. La persistencia en el camino equivocado llevó a un aumento de la inflación entre el mundial de Brasil 2014 a Rusia 2018 elevando el acumulado a 356%. No conformes con los magros resultados, del Mundial de Rusia 2018 a Qatar 2022 la inflación acumulada es del 674%”, concluye el documento.