Óscar Martínez fue reelecto para continuar siendo el secretario de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM). Hoy se desarrolló la segunda jornada de elecciones, en las que obtuvo la victoria y les agradeció a sus compañeras/os con estas palabras:

“Ante las críticas y cuestionamientos de otros compañeros, sabemos que tenemos la capacidad y el compromiso para esforzarnos en la búsqueda de respuesta en cada uno de los reclamos. Sabemos que los compañeros muchas veces demandan mucho más de lo que podemos, tendremos que lograr entre todos con esta nueva comisión, que insisto tenemos un equipo que combina experiencias y juventud para tratar de dar respuestas a las demandas de nuestras compañeras y compañeros”.

“Nosotros no dejamos de responder a los compañeros porque estamos en campaña, aislados o de vacaciones, si es necesario las cortamos para ponernos a disposición en conflicto de una lucha, porque comprendemos nuestra responsabilidad y que a nadie se le ocurra dudar por un momento que dejemos de poner lo que hay que poner para adherirnos a los reclamos. Debemos mantener ese compromiso y elevar esas banderas que hemos heredado, para que nadie venga a pretender confundir a los metalúrgicos con un discurso hueco y vacío, implantando una ilusión o sueño que se le ocurrió en una trasnochada, donde elaboran estrategias para conseguir votos de alguna forma miserable”.

El histórico dirigente es oriundo de la ciudad de Bariloche, en donde se desempeñó como mozo, Óscar Martínez llegó a convertirse en gremialista y elegido por sus compañeros como secretario de la UOM. Llegó a Rio Grande con el objetivo de probar suerte y comenzó trabajando en lugares que hoy ya no existen, entre ellos el hotel Ibarra. Ingresó en el 86’ a la planta de BGH. Tiempo más tarde y transcurrido algunos años dentro del rubro industrial, comenzó a desarrollarse como sindicalista a causa del uno de los sucesos más recordados por los trabajadores industriales: La huelga por 40 días en el 88’. Luego, tomó una función política como diputado nacional en el 2013, para llegar al mando de la UOM.